El nuevo alcalde de Ñuñoa, el derechista Sebastián Sichel, ex ministro de Piñera, y nombrado presidente por él en Banco Estado, y cuyo nombre apareció debido a este cargo en el caso Hermosilla, celebró la suspensión del cambio de nombre de la calle República de Israel, que iba a volver a llamarse Nueva Ñuñoa. El ahora alcalde de la comuna, ya había criticado la medida del antiguo consejo y anunció ya en ese momento que empujaría un nuevo proceso una vez que asumiera como jefe comunal.

“Se había hecho este cambio apurado, sin evaluar los costos del cambio para el municipio, sin preguntarle a los que duermen o tienen negocio en esa calle”, señaló, refiriéndose al cambio que había sido aprobado a principios de diciembre por el Concejo Municipal anterior.

Pero Sichel busca confundir a la población, el Concejo Municipal previo a las últimas elecciones votó mayoritariamente a favor del cambio de nombre, donde solo se registró un solo voto en contra, mientras que seis fueron a favor. Esto en solidaridad con el pueblo palestino que es víctima de un genocidio aún en curso por parte del Estado de Israel, al que las y los vecinos ya no querían de nombre en su calle.

Y más aún, según informó La Tercera, tres de las cuatro juntas de vecinos que tienen competencia sobre la calle afectada manifestaron su apoyo a la iniciativa, la cual fue impulsada por la organización «Ñuñoa por Palestina», conformada por residentes de la misma comuna.

Sichel busca ubicarse en la batalla cultural de la que era/es la comuna emblema del Frente Amplio, hace unos días de hecho en entrevista a La Cuarta del grupo Copesa (La Tercera), llamó a destrozar el ñuñoismo, "Quiero que el respeto sea la tónica y no el estigma y la caricatura. Me encantaría que podamos hacer asados carnívoros y veganos en la misma parrilla y seamos igual de felices, ¿Cachai? Y que nadie mire con superioridad moral al otro y yo voy a pelear por eso", indicó.