Manfred Reyes Villa, fue proclamado este 5 de enero como candidato presidencial por el partido político Autonomía Para Bolivia (APB) - SUMATE. Este candidato es otro más de los viejos representantes de la derecha. Aunque intenta separarse del otro agrupamiento derechista protagonizado por Carlos Mesa, Fernando Camacho, Doria Medina y Tuto Quiroga expresa la misma política, al servicios de sus intereses. Hoy ante la decadencia del MAS busca capitalizar el descontento social. La salida para el pueblo trabajador no es por derecha y el MAS ya demostró que eligió gobernar al servicio de los agroindustriales y banqueros. |
Su carrera política se ha visto marcada por su rol como edecán de Luis Arce Gómez durante la dictadura de Luis García Meza entre 1980 y 1981, así como por su participación en la firma de contratos para la privatización del agua de Cochabamba a favor del consorcio “Aguas del Tunari” en el año 2000. Además, Reyes Villa fue uno de los principales responsables de los conflictos alrededor de la aprobación del referendo por la autonomía departamental, que se ha denominado “Enero Negro” en 2007, que dejó como resultados campesinos fallecidos y heridos., Cabe recalcar que, en este periodo de violencia, Reyes Villa respaldó a la organización Jóvenes Por la Democracia (JPD), hoy conocida como Resistencia Juvenil Cochala (RJC).
En su proclamación, Reyes Villa enfatizó que su candidatura tiene como objetivo “poner orden” en el país. Sus promesas electorales incluyen la implementación de paquetes económicos neoliberales que van a profundizar la crisis y precariedad de las familias trabajadoras en Bolivia. Entre sus propuestas se encuentran levantar la subvención del combustible y permitir que la comercialización de este recurso esté en manos de empresas privadas.
Autodenominándose como el único candidato opositor, Reyes Villa ha recibido el apoyo de los sectores más conservadores de Cochabamba y cuenta con el respaldo de la RJC, grupo paramilitar liderado por Milena Soto, quien ha confirmado esta alianza, lo que ha generado preocupación entre sus detractores. A pesar de presentarse como un defensor de valores como igualdad, libertad y democracia, Reyes Villa ha rechazado unirse a otros líderes opositores como Tuto Quiroga y Carlos Mesa, insistiendo en que su propuesta es la única viable para enfrentar al oficialista Movimiento al Socialismo (MAS).
La proclamación de Reyes Villa como candidato presidencial por el partido Autonomía Para Bolivia (APB) - SÚMATE, no solo revive viejas controversias por su historial de alianzas con sectores conservadores y paramilitares, sino que también plantea preocupaciones sobre el futuro político y económico de Bolivia. Su candidatura, afín a los intereses de la burguesía y de las élites económicas, sugiere un regreso hacia políticas autoritarias y neoliberales que profundizarán la dependencia del país respecto al capital transnacional, eliminarán subsidios y privatizarán empresas estatales, acciones que agravarán la situación de las familias trabajadoras y las desigualdades, convirtiéndose en una amenaza para los los movimientos populares, para lxs trabajadores, para el movimiento de mujeres y las clases subalternas.
Reyes Villa, un viejo representante político neoliberal, miembro de la casta militar y servil al imperialismo, apodado como “bombón” hoy logra ser un candidato que “compite” gracias a la sistemática política de conciliación de clases del MAS. No olvidemos que luego del golpe de Estado volvió de su exilio al país quedando impune.
Para las mujeres, para las diversidades y disidencias sexuales y de género, para los sectores populares y para el pueblo trabajador la salida no es por derecha. La única forma de salir de la crisis es impulsando la lucha y la autoorganización, recuperando nuestra independencia política y poniendo en marcha la construcción de un Partido de las y los Trabajadores Revolucionarixs (PTR). Esta es la tarea de primer orden que la LOR-CI convoca a realizar.
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