Desde un hotel en el centro porteño, Daniel Scioli dio ayer al mediodía una conferencia de prensa, tras los resultados electorales de este domingo, y de cara al ballotage.
Un apesadumbrado gobernador, en crisis por la derrota en la provincia de Buenos Aires y el ajustado resultado presidencial, ofreció unas palabras, y luego aceptó preguntas de algunos periodistas.
Sin que sus gestos acompañen sus palabras afirmó que "siendo más optimista que nunca, no hay dos sin tres: ganamos las PASO, ganamos ayer y vamos a ganar ahora el 22 de noviembre", enfatizó Scioli, aunque sus expresiones y el tono de su voz daban cuenta del golpe sufrido ayer. El final abierto de cara al ballotage hizo que el gobernador hablara también pausadamente, midiendo palabra por palabra.
El candidato presidencial del kirchnerismo sostuvo que el próximo 22 de noviembre "comienza una nueva elección", y llamó a los votantes del progresismo, del Frente Renovador y del espacio de Adolfo Rodríguez Saá, con el fin de ganarle al aspirante de Cambiemos, Mauricio Macri, en segunda vuelta.
Scioli enfatizó que en el ballotage se "prioriza el círculo celeste y blanco o esa concentración de dejar librado el mercado, las políticas de endeudamiento que tan mal nos hicieron a los argentinos". Convocó de cara al balotaje del mes próximo a quienes "comparten una visión del Estado con un rol social activo", y advirtió que la segunda vuelta del "22 de noviembre es mucho más que la confrontación entre dos espacios. La palabra cambio puede ser muy atractiva, pero tenemos que dar una discusión profunda sobre qué tipo de cambio. Sé lo que tenemos que cuidar y mantener, y también cómo sigue esta agenda del desarrollo nacional".
De todos modos, a los adversos resultados de ayer se suma el anuncio que había realizado Scioli de un gabinete de derecha para un eventual gobierno suyo. Esos dos elementos, juntos, le quitaban toda convicción a sus palabras. Como afirmara el domingo Nicolás del Caño, “el kirchnerismo, con un candidato derechista, le abrió el camino a Macri”
Al mismo tiempo, el candidato presidencial felicitó públicamente a su rival de Cambiemos, Mauricio Macri, y a la gobernadora electa de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, "interpretando", según dijo, "lo que la sociedad exige cada día más".
Por último, a diferencia de lo sucedido en las PASO, dijo estar dispuesto a aceptar un debate presidencial con Mauricio Macri antes del ballotage. |
