La actividad manufacturera en Estados Unidos se desaceleró en octubre por cuarto mes consecutivo, pero los analistas advierten que el aumento de nuevos pedidos preanuncia mejores condiciones para un sector que consideran afectado por la fortaleza del dólar y los recortes de gastos en empresas de energía.
El dato publicado por Instituto de Gestión de Suministros (ISM) manufacturero de EEUU se situó en los 50,1 puntos en octubre, frente a los 50,2 puntos que registró en septiembre, por detrás del pronóstico para este indicador que lo situaba en los 51 puntos. Este es su nivel más bajo desde diciembre de 2012, a pesar de que una lectura superior a 50 puntos indica una expansión en el sector manufacturero.
Los nuevos pedidos aumentaron a 52,9 desde 50,1 en septiembre. Sin embargo, el índice de empleo cayó a 47,6, la lectura más baja desde agosto de 2009, y fue la primera vez que cae debajo de 50 desde abril.
Debido a la coyuntura de pobre crecimiento económico mundial, que en EE.UU. e expresa con signos de recuperación sostenidos pero débiles; las manufacturas, que representa el 12% de la actividad económica, también han sido golpeadas por esfuerzos de las empresas por reducir un exceso de inventarios y la desaceleración de la demanda desde el extranjero.
E este sentido, si vemos el nivel de manufactura mundial, tenemos que el Índice de Gerentes de Compra Manufacturero Mundial (PMI) de JP Morgan (elaborado junto a Markit), fue de 51,4 el mes pasado tras mantenerse estable en septiembre en 50,7, la misma cifra de agosto y que representó un mínimo en más de dos años.
"El sector manufacturero global se mantuvo en un bajo ritmo de crecimiento durante octubre, pues el derrumbe de los mercados emergentes asiáticos que continúa siguió contrarrestando la expansión en muchos de los mayores países industriales desarrollados", según un comunicado que acompañó la cifra.
Un subíndice que mide los precios de producción cayó a 48,6 desde 48,7, su lectura más baja en dos años y medio. El PMI global combina datos de sondeos de varios países, entre ellos Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña y Rusia.
El gasto en construcción un dato alentador
En otro informe publicado el lunes, el Departamento de Comercio afirmó que el gasto en construcción subió un 0,6%, a 1,09 billones de dólares, el nivel más alto desde marzo de 2008.Los desembolsos para construcciones escalaron un 14,1 por ciento frente a septiembre de 2014.
De esta forma, el aumento en el gasto en construcción, ayudó a contrarrestar los efectos de cierto enfriamiento en el gasto del consumidor y la persistente debilidad en manufacturas. |
