En el marco del conflicto sobre el proyecto de Carrera Docente, presentado por el gobierno y que mas del 90% del profesorado rechazó, ayer en una sesión de la comisión de educación del Senado, se aprobó el proyecto en general y de manera unánime, iniciando con ello una segunda etapa de su trámite parlamentario no exento de controversias. |
Con aprobación unánime y en general por parte de la comisión de educación del Senado, hoy se dio inicio a la tramitación del proyecto de ley en la cámara alta, en base a lo cual los parlamentarios podrán realizarle indicaciones para pasar a discutir sobre este proyecto en particular.
Recordemos que este proyecto no estuvo exento de contradicciones, enfrentando al gobierno con el profesorado, el cual lo rechazó en más de un 90% e inició un proceso de movilización nacional que se prolongó por 57 días que sólo se pudo bajar gracias a la acción conjunta del gobierno, los parlamentarios y las direcciones del magisterio contra la pujanza de los profesores de base. De esta manera, la casta de políticos empresariales avanza un paso más en un proyecto de ley que satisface nada más que sus propios intereses, haciendo oídos sordos de la demanda instalada por las bases del magisterio.
Andrés Allamand (RN), presidente de la comisión, y Jaime Quintana (PPD), como integrante, valoraron la aprobación del proyecto planteando que ha habido un cambio significativo desde que fue presentado por el gobierno, mientras que Ignacio Walker (DC) insistió en la idea de integrar una prueba obligatoria para quienes egresen de pedagogía. Todos, gobierno y oposición, celebraron el consenso, el mismo que se generó a propósito de la discusión en torno a la glosa de gratuidad integrada en el presupuesto para el próximo año donde Patricio Walker (DC), hermano de Ignacio, se abstuvo mientras su partido confluía tanto en argumentos como en objetivos con la Derecha, en defensa de la educación de mercado y los empresarios que lucran con ella.
Y es que en realidad lo que se expresa es el frente común de los privilegiados para sobreponer la defensa de sus intereses a las necesidades de los trabajadores y sus hijos, sobrecargando aún más la mochila del agobio sobre las espaldas de los docentes, que si bien ya no se encuentran movilizados, aún critican el proyecto de ley.
Mientras tanto, las direcciones oficialistas y disidentes del Colegio de Profesores, luego de la controvertida bajada del paro nacional mediante una combinación de imposiciones y campañas contra quienes estaban por seguir, no ha logrado integrar las demandas sentidas de los docentes de base, que se encuentran sometidos a recuperaciones extenuantes e incluso despidos, demostrando con ello nuevamente que la confianza en la casta de la corrupción y las colusiones, pregonada por igual por oficialistas y disidentes del directorio nacional, nunca tuvo asidero alguno.
Este nuevo paso en la tramitación del rechazado proyecto deja abierta la necesidad en el profesorado tanto de recuperar el magisterio con una alternativa que no muestre confianza y sea independiente de conglomerados políticos empresariales, exprese las demandas sentidas de los profesores de base y retome el camino de lucha de la rebelión de las bases y el paro docente para imponérselas a los privilegiados. |