El gobierno radical de Juan Jure atraviesa una de las mayores crisis de su mandato, luego de haber ganado las elecciones gracias a una campaña basada única y exclusivamente en la promesa construcción de viviendas para sectores populares. El plan municipal “Viviendas para clase media”, ingresó en una etapa de incertidumbre que genera la preocupación de los futuros destinatarios.
El proyecto comenzó con la licitación y posterior adjudicación de la obra, con apoyo de la oposición, a una empresa (IVECOR) que, según el municipio, gracias a su “capacidad técnica” podía afrontar las exigencias de los pliegos de licitación, pero que, como antecedente, no había construido una sola vivienda y que en cuanto a su capacidad económica, presentaba grandes problemas financieros.
Hoy la empresa se encuentra imposibilitada de afrontar el primer tramo del proyecto, siendo que la Municipalidad ya pagó por 180 viviendas de las cuales la empresa solo entregó 63, la mayoría con graves falencias estructurales según señalan los vecinos.
Esta semana el ejecutivo municipal informó su intención de traspasar la obra, por lo que pretende que la empresa IVECOR subcontrate a otra empresa riocuartense, INCISA, para continuar con el plan. Un dato que señalan diversas fuentes es que INCISA tampoco posee antecedentes en la construcción de viviendas.
La empresa que se va y la que llega están negociando los detalles de lo que será el traspaso de la obra más importante que encaró el municipio de Río Cuarto en los últimos años. Hasta el momento no queda claro que pasará con el futuro de las obras y del proyecto.
Lo que queda suficientemente claro es la falta de transparencia y de control que revela la incapacidad del gobierno de Jure para afrontar una de las demandas más sentidas de la clase trabajadora. A esto se suma la incertidumbre que viven los trabajadores de la construcción que venían siendo parte de este emprendimiento. Los obreros se manifestaron este miércoles por la mañana exigiendo el pago de los salarios adeudados, que ya alcanza a 3 quincenas atrasadas.
Las 63 casas de Jure
A las dudas sobre la situación de IVECOR y el inminente traspaso de las obras a otra empresa, se suman las críticas de los adjudicatarios, quienes revelaron graves falencias en la terminación y estructuras de las casas, lo que resulta muy peligroso para habitarlas.
Una vecina destacó en un medio local: “Hay detalles muy notables que significaron un golpe importante a la ilusión. Hay grietas en las paredes, cerámicos mal puestos, zócalos que se rompen, filtraciones y humedad. Incluso no pintaron parte del frente. Hay roturas en el cielo raso y las taparon con pincelazos. También tuvimos problemas en el sistema eléctrico”. Añadió que: “no se cumplió con la promesa de controlar para evitar todo estos descuidos. Me dicen que me conforme porque tengo una casa y no debo pagar más alquiler. Pero yo la casa la estoy pagando”.
Otro vecino de Guarnición Aérea afirmaba en otro medio de la ciudad que “Los pisos son de muy mala calidad, lo mismo que los zócalos que se rompen todos. Hay casos graves, como haber construido una cocina más chica que las medidas previstas en plano”. También resaltó que “durante más de 10 años estuvimos esperando una vivienda, hay gente trabajadora y el proyecto es muy importante, pero faltó control”.
Hasta el momento, desde el PJ y el resto de la oposición sólo se limitaron a esbozar críticas pero sin realizar propuestas serias que apunten a solucionar los problemas de demanda habitacional de los trabajadores y sectores pobres, en una de las ciudades donde los negocios y las especulaciones inmobiliarias más se desarrollaron en estos años. |