Según los líderes de los países capitalistas más ricos del planeta las y los trabajadores no tendrían que tener derecho a una prejubilación después de estar años trabajando.
En el contexto de una persistente crisis económica, los trabajadores son los que están acarreando los mayores costes mientras los grandes capitalistas tratan por todos los medios aumentar los beneficios empresariales e individuales. Empeorando las condiciones laborales de los sectores precarios, ahora pretenden que resulte más difícil tener una jubilación “digna”. El mismo secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, advirtió a finales de 2014 que habrá que “trabajar más tiempo y contribuir más” para lograr unos ingresos, según él, “decentes”.
Los ataques neoliberales de los distintos gobiernos de la OCDE, organización de la cual es miembro el Estado español, van también a profundizar el ataque sobre los trabajadores que están con mejores condiciones. Incluso para los que llevan años levantándose día tras día para ir a trabajar pretenden que no puedan tener derecho a prejubilarse porque sería “improductivo”.
Ser “improductivo”, desde el punto de vista de las leyes del capitalismo, significa que un empresario no puede expropiar la riqueza generada por el trabajador, es decir, que si no cumples este “papel” eres “improductivo”. El informe elaborado por la OCDE, “Pensions at a glance 2015”, reclama la eliminación de los “privilegios” de la prejubilación argumentando que “los sistemas de jubilación anticipada deben eliminarse y hay que afrontar los obstáculos para el trabajo de los más mayores con sistemas de desempleo que estimulen la actividad como forma de proteger y ayuda a la gente para que prolongue su permanencia en el mercado de trabajo”.
Para hacer pasar estas medidas tratan de emplear un lenguaje para convencer de que no jubilarse anticipadamente es “un favor” a los trabajadores. “Los trabajadores más mayores despedidos, a menudo, entran en programas de jubilación anticipada. Esto, que tienen interiorizado empleados y empresarios, da a los trabajadores pocas oportunidades de reciclarse y adquirir nuevas habilidades que refuercen su empleabilidad” según dice el mismo informe.
Los datos hablan por sí solos
Mientras los “Grandes de España” hablan de “empleabilidad” en vez de prejubilaciones – es decir negar el derecho a una jubilación y seguir trabajando incluso en peores condiciones- ellos se prejubilan con cifras escandalosas.
Tan sólo el BBVA en 2009 gastó 25,8 millones de euros en sueldos de los miembros del Consejo de Administración y de sus directivos. Su consejero delegado, José Ignacio Goirigolzarri, lo hizo con casi 53 millones de euros en el bolsillo en 2009, con un sueldo vitalicio anual de 3 millones de euros, es decir, 250 mil euros al mes. Lo que queda claro es que no tendrá que acogerse a las ayudas de 420 euros mensuales del Gobierno.
El ataque sobre el conjunto de los y las trabajadoras no ha terminado. El próximo gobierno del Estado español tras el 20 de Diciembre intentará llevar adelante una segunda reforma laboral y un conjunto de medidas antiobreras, tal como exige Bruselas. | 
