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El presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Alejandro Vanoli, dejará su cargo un día antes de la asunción presidencial de Mauricio Macri, según anticiparon fuentes cercanas al gobierno electo. Ayer voceros de la entidad anunciaron que hoy habrá definiciones pero se negaron a confirmar la decisión de la renuncia de Vanoli antes que él.
El futuro presidente de la Argentina, Mauricio Macri, tenía previsto reemplazar a Vanoli por un economista de su confianza y ex funcionario del gobierno de la Alianza en 2001, Federico Sturzenegger. Incluso había pedido su renuncia en público horas después de su triunfo en el balotaje del 22 de noviembre. La semana pasada, el presidente del BCRA había brindado una conferencia donde afirmó que es “una decisión personal” su renuncia al frente de la entidad que “está madurando”.
Alejandro Vanoli tenía mandato hasta 2019, pero su futuro no sólo se oscureció con la derrota del FpV en las elecciones presidenciales, sino que la administración entrante complicó sus condiciones de continuidad mediante la presentación de una denuncia penal en su contra, por la cual está imputado, por la venta de dólares futuros a un precio menor a del mercado.
La urgencia del equipo económico entrante del presidente electo por la renuncia de Vanoli reside en sus planes políticos inmediatos de eliminar el “cepo” cambiario lo antes posible y dejar flotar el dólar a un tipo de cambio unificado. Esta devaluación del peso, que los economistas de Cambiemos estiman en torno al 45 %, requiere una entrada importante de dólares para el cual ya se están entablando negociaciones para un nuevo endeudamiento. Pero el “equipo” de Macri también considera prioritario controlar los resortes de la máxima autoridad monetaria, por lo cual, de concretarse la renuncia de Vanoli quedaría más liberado el camino.
No obstante, para el completo control del BCRA el macrismo necesita hacerse de 6 de los 10 cargos del directorio de la autoridad monetaria. La renuncia de Vanoli arrastraría consigo a los dos directores que llegaron a la entidad monetaria con su mandato: Flavia Madorrán y Pedro Biscay. El vicepresidente del Banco Central, Miguel Angel Pesce, podría ser removido por decreto presidencial si así lo quisiera Macri. El resto de los directores son cercanos a Capitanich y principalmente al actual ministro de Economía, Axel Kicillof. |
