Fue la crónica de una desilusión anunciada. Primero, las decenas de miles de rosarinos que votaron a Ciudad Futura en las elecciones provinciales se desayunaron que esta fuerza no era, como decían, independiente, sino que se unía a la campaña por el voto a Scioli. Con el mismo fervor que La Cámpora, los compañeros de Ciudad Futura hicieron una campaña centrada en atacar al Frente de Izquierda que llamaba a darle la espalda a los candidatos del ajuste y la represión. Acusaban a Del Caño y a la izquierda de “hacerle el juego a la derecha” por votar en blanco.
Resulta que el discurso anti Macri no duró ni una sesión de Concejo Deliberante. En una laberíntica y “rosquera” votación, los concejales de Ciudad Futura saltaron otra tranquera: votaron a Carlos Cardozo, del PRO, como Vicepresidente del Concejo. ¿No era que el límite era el PRO? Podrían haberse abstenido, como hizo Celeste Lepratti o, bizarramente, el propio Cardozo. Pero no, los compañeros parecen haber dejado las frases contra la derecha en los afiches de campaña. Votaron afirmativamente al PRO y fueron votados unánimemente para ocupar la Segunda Vicepresidencia, a manos de Caren Tepp. Ni un solo macrista se abstuvo de votar a esta “izquierda independiente” reducida en grasas y calorías.
Además, para la Presidencia del Concejo votaron a María Eugenia Schmuck, una radical que supo compartir listas con Boasso, el ex candidato a vicegobernador de Del Sel. Schmuck, además, acaba de integrarse a la gestión municipal de la mano de Pablo Javkin, que ocupa la Secretaría de Gobierno en el ejecutivo de Mónica Fein. Una clara referente del Frente Progresista Cívico y Social, sostenedor del régimen narcopolicial santafesino.
Como si esto fuera poco, Caren Tepp, estrenando su nuevo cargo como autoridad del Concejo, fue parte central del acto de asunción de Fein. La foto que acompaña esta nota es una de las tantas postales (en este caso un posteo de “Charly” Cardozo) que se vieron por estos días. La presencia de Tepp en el corazón de la propaganda oficial es una cobertura y maquillaje por izquierda al régimen santafesino, basado en el fraude electoral, la violencia policial, la complicidad con el narcotráfico y los privilegios para un puñado de empresarios y multinacionales.
Con esto, el Frente Ciudad Futura consagra un récord mundial: en menos de dos meses de las elecciones que les dieron sus primeros cargos ya hicieron acuerdos con todos los partidos políticos tradicionales del país: el PJ, la UCR-PS y la derecha reciclada del PRO. ¡Ni Pino Solanas derrapó tan rápido! Se ganaron el premio FREPASO del año, hay que reconocérselos. ¿Qué futuro le queda a esta Ciudad Futura sin una cuota de principios y coherencia política?
En contraste con esta proclamada “izquierda” que vive de pactos y acuerdos con la casta política privilegiada, Nicolás Del Caño, el principal referente del Frente de Izquierda, es atacado por el macrismo por negarse a reunirse con el Presidente. Por su parte, Scioli –al que votaron los compañeros del PCF- y Massa hacen cola para rendir tributo al nuevo monarca y su corte de CEOs y empresarios. Parece que los únicos que realmente dicen “No Macri, no” son los integrantes del Frente de Izquierda. Por suerte, para esta faena de cambiar el mundo, la coherencia paga. El resto es oportunismo sin destino. |
