Con la presencia de cientos de trabajadores y muchas personas que se acercaron a dar su solidaridad, a las 18hs arrancó el aplauso en las puertas del edificio de lo que antes era el Correo Central. También varios artistas llevaron su apoyo y fueron enviando adhesiones al Facebook de los trabajadores.
Esta fue la segunda acción que realizaron los trabajadores, que se encuentran en estado de asamblea permanente. Durante la misma leyeron un documento en donde los 675 trabajadores del Centro Cultural pidieron por la continuidad laboral y de todas las actividades que se realizan allí. Desde LID nos hicimos presente y charlamos con los trabajadores.
¿Por qué se están organizando y como viene el conflicto?
Joven trabajador del CCK: “Esto (el aplauso) como al igual que la vez pasada que convocamos al abrazo multitudinario al CCK, son acciones que decidimos tomar los trabajadores del CCK al ver que no nos dan respuesta desde los Ministerios al petitorio de qué va a pasar con nuestros contratos y quiénes son los que vamos a seguir trabajando en este lugar. Básicamente pedimos por eso, y para continuar con la democratización de la cultura. Estamos todos luchando desde adentro como trabajadores. Lo que pedimos es pelear por los contratos de trabajo, y este es el plan de lucha más soberano que encontramos”.
Vanina Falco, es trabajadora del equipo de música popular, producción artística y delegada del equipo: “La situación actual después de todo un derrotero que atravesamos en estos quince días, es que seguimos sin tener una respuesta fehaciente de parte de las autoridades. El trato está siendo cordial (…), seguimos manteniendo un trato cordial y valorando la instancia de diálogo. Pero lamentablemente todavía no hay nadie responsable que nos haya podido decir si podemos garantizar la continuidad de los trabajadores. La última respuesta que tenemos es del martes pasado, un día antes de que se constituyera el Ministerio y de que un representante del equipo de transición nos dijera que no podían garantizar la renovación de los contratos. A raíz de eso empezamos a organizarnos que es lo que lo que hoy derivó en un aplauso. O sea que esto que hoy vivimos lleva cuatro días de organización nada más. Ahí abrimos nuestro Facebook, no somos una horda, somos todos los trabajadores tratando de visibilizar esta situación, porque obviamente estamos angustiados, estamos con mucha ansiedad para que las nuevas autoridades nos informen cómo seguimos. El miércoles ya el Ministro tiene cargo como tal, confiamos en que los próximos días podamos tener una reunión con él para definir esta situación, que es apremiante, porque nosotros firmamos un contrato con el Ministerio de Cultura anterior, todos creímos que esos contratos iban a ser validados e íbamos a tener trabajo, ahora nos estamos enterando que no”.
LID: ¿Cómo es la situación laboral en el CCK, ya que por el reclamo, no hay trabajadores en planta permanente? ¿No plantean esa reivindicación?
VF: “No existe la planta permanente porque el Centro Cultural Kichnner, no existe como tal. No tiene una personería jurídica, no tiene una DGA, (Dirección General de Administración) No existe, en ese sentido no existe. Existe el edificio, lo que sucede adentro, pero no tiene una estructura jurídica que pueda nombrar personal y por ese motivo, todos los trabajadores que trabajamos acá estamos contratados como monotributistas. Esos contratos vencen al 31 de diciembre. Nosotros firmamos una renovación de esos contratos pero que hoy las nuevas autoridades nos dicen que no son válidas”.
LID: ¿Tienen planteadas próximas acciones?
VF:“Ahora vamos a esperar a ver cuál es la repercusión de esto en las nuevas autoridades y si el lunes nos reciben o no. Seguimos en estado de asamblea permanente”.
Las condiciones de precarización que viven los trabajadores del CCK son compartidas por miles de trabajadores estatales de distintas dependencias. Sobre esta situación, generada durante los años del gobierno kirchnerista, el gobierno de Macri se plantea avanzar con un ajuste.
Los trabajadores del CCK se suman a la lucha y resisten también desde el campo cultural, peleando por sus puestos de trabajo. Desde que asumió Macri su “diálogo” fue a decretazos y con el consenso de los empresarios para hacer pasar despidos, ajustando el bolsillo de los trabajadores y con represión, como se vio en Cresta Roja.
El arte y la cultura pueden ser transmisores y un gran amplificador de las luchas, el único camino es de coordinación y organización con el conjunto de los trabajadores para que no haya familias en la calle nunca más. | 
