Foto: archivo La Razón
Algunos estuvieron presentes en Comodoro Py y otros lo vieron atentamente por televisión. La sentencia del juicio por la Masacre de Once no pasó desapercibida para nadie que trabaje en el ferrocarril. Sobre todo cuando la justicia puso en un nivel de igualdad a uno de sus compañeros, el maquinista Marcos Córdoba, con empresarios y funcionarios asesinos.
“Tendrían que haberlos condenado a perpetua”
Un trabajador de la Línea Sarmiento, que a su vez es exempleado de la empresa vaciada EMFER, dijo que entre los compañeros “hay mucha bronca, sobre todo en quienes tuvimos y sufrimos como jefes a los Cirigliano. Por un lado condenaron al motorman, que no tuvo nada que ver en cuanto a responsabilidad, y por otro lado, si bien condenaron a dos de los Cirigliano, absolvieron al tercero. Yo creo que todos los compañeros más o menos pensamos y sentimos lo mismo. Para mí tendrían que haberlos condenado a perpetua a todos, menos a Córdoba, claro. Los que trabajamos en EMFER conocimos muy bien la corrupción de los Cirigliano”.
“La justicia no está hecha para los trabajadores”
Un mecánico de los talleres del Sarmiento, quien también ingresó luego de la lucha de EMFER, dijo estar “disgustado con este fallo, porque no puede ser que hayan dejado libre de culpa y cargo a uno de los Cirigliano mientras a Córdoba le dieron más de tres años de prisión. Lo mismo con los funcionarios de la CNRT que quedaron absueltos. Eso indigna. Evidentemente la justicia no está hecha para los trabajadores. Mientras al chorro de Jaime le dan 6 años, a nosotros nos persiguen con causas abiertas por resistir los despidos en EMFER, cuando en realidad lo único que hicimos fue defender nuestros puestos de trabajo”.
“Transformar esa bronca en organización”
Una operaria que trabaja también en el Sarmiento confesó tener “un sabor amargo por este fallo. Para mí es una pésima burla. Pero sabemos que la justicia es de clase y que de la única forma en que vamos a vengar a los nuestros es que toda esa bronca e impotencia se transforme en lucha y organización, porque de ese modo fue que los familiares de las víctimas lograron sentar a esas lacras en el banquillo de los acusados y se los pudo juzgar”.
“Córdoba nada podía hacer”
Trabajadores de la Agrupación Ferroviaria Naranja también se manifestaron apenas conocida la sentencia. Marcelo “Cucha” González, maquinista en la Línea Roca, señaló que “es increíble que uno de los máximos responsables de esta masacre como Jaime haya recibido menos del doble que Marcos Córdoba, el maquinista, que nada podía hacer par frenar un tren en malas condiciones y que pudo haber sido él mismo otra víctima fatal. Es muy injusto que un simple trabajador tenga una condena cuando los mecanismos estaban todos dañados por responsabilidad de altos funcionarios y empresarios”.
“Indigna que De Vido ni siquiera haya sido juzgado”
Andrés Padellaro, quien encabezó la lista de oposición al pedracismo en la Unión Ferroviaria de la Línea Roca, consideró “una terrible falta de respeto al público usuario que tipos como Jaime pasen sólo unos añitos en la cárcel o que su jefe De Vido ni siquiera haya sido juzgado, cuando hay 51 vidas obreras que se perdieron para siempre. Eso deja un sabor amargo porque no están pagando realmente por el crimen que cometieron”.
“El peligro en los trenes continúa”
Augusto Dorado, trabajador del sector de infraestructura, finalmente planteó que “tanto desde la Naranja como del conjunto de las agrupaciones de izquierda en el ferrocarril denunciamos mucho antes del 2012 que podía suceder un ’Cromañon ferroviario’. Y lamentablemente no nos equivocamos. Jaime y Schiavi la sacaron demasiado barata. Luego vino Randazzo con sus promesas incumplidas y una improvisación asombrosa. Hoy la obra de electrificación a La Plata está siendo realizada al estilo ’lo atamo con alambre’. Dietrich la continua en el mismo sentido y plantea un potencial peligro para usuarios y trabajadores viajar en condiciones tan precarias”.
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