En la tarde de ayer fue liberado Marcelo Mallo, ex referente de Hinchadas Unidas Argentinas, una agrupación de barra bravas que viajaron al Mundial de Sudáfrica en 2010. El líder de HUA estuvo preso en los últimos días a raíz de los operativos en la fuga de los condenados, Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci por el triple crimen de General Rodríguez. Mallo, insistió en decir que no conoce a los prófugos y acuso a la policía por detenerlo, incluso aseguró que el juez de Garantias, Cesar Melazo le prometió al excarcelarlo que investigaría a los jefes policiales que le habrían pasado “mala información”, sobre su supuesta vinculación con los prófugos.
Por esta causa volvió a reflotarse la interna kirchnerista, luego que el ex jefe de Gabinete Aníbal Fernandez diga que Mallo “hace cinco años que trabaja para Julián Dominguez”, mientras que voceros del ex presidente de la Cámara de Diputados sostuviera que “no conoce personalmente” al ex titular de Hinchadas Unidas y que “nunca trabajo para él”.
Mientras tanto, Mallo sostenía "Soy un barrabrava de los desprotegidos que abrazó la causa nacional y popular". Acto seguido, dijo haber "acompañado la candidatura de Julián Domínguez" a gobernador bonarense y elogió a Aníbal Fernández, a quien calificó como "una figura notable de este país" pero, a su vez y como desconociendo las palabras de su defendido, el abogado José Novelo dijo: que presentará un hábeas corpus a favor de su cliente, Novello aseguró que Mallo "no tiene ninguna relación directa ni con (Julián) Domínguez ni con Aníbal Fernández".
Al ex dirigente de “Hinchadas” se le incautaron de su domicilio al momento de ser detenido, armas de guerra y una picana eléctrica, por las armas que le encontraron insistió que las mismas estaban registradas en el RENAR y por la posesión de una picana eléctrica, Mallo manifestó que la tenía por seguridad y que cualquier persona tiene una. Su abogado decía mientras tanto afirmó que su defendido la tenía "como hobby".
Ambos argumentos resultan descarados y atroces en un país donde miles de trabajadores, mujeres y jóvenes soportaron la picana durante las sesiones de tortura. Y cuando también se sabe que el actual secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, es un gran defensor de las pistolas taser.
Estos dichos buscan naturalizar como “utensillo doméstico” a uno de los instrumentos de tortura utilizados por el aparato represivo estatal y privado.
La picana eléctrica fue creada por Leopoldo “Polo” Lugones, hijo del conocido escritor Leopoldo Lugones, su uso comenzó a propagarse en la década del 30, conocida en la historia argentina, como la década infame. |