"La información falsa hizo que los otros dos se escaparan", afirmó en una particular “conferencia de prensa” la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. En la “conferencia” estaban presentes solo TN y Canal 13 y casi ningún otro medio.
Finalmente, luego de casi ocho horas desde que se anunció oficialmente la captura de los tres prófugos, la ministra de Seguridad realizó declaraciones a la prensa. Estaba acompañada solamente por el secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco.
"Hubo una información que recibimos que fue falsa, que dio a entender que los recapturados eran los tres prófugos", insistió Bullrich desde la provincia de Santa Fe.
Sin aclarar de dónde salió la presunta “pista falsa”, la ministra sembró intrigas en torno a que la información provino de fuentes “confiables” de las fuerzas de seguridad nacionales, provinciales o de los servicios de inteligencia.
Tampoco aclaró porqué las supuestas pistas falsas fueron seguidas y confirmadas como hechos certeros durante horas por las autoridades del Gobierno y hasta por el mismo presidente de la Nación.
Ante la consulta de por qué no habían chequeado los datos que recibían, la ministra dio una respuesta insólita: "La información estaba chequeada sino no la hubiéramos dado". Parece que Bullrich tiene un problema con el concepto de “chequeado”.
Luego afirmó: "Los que dieron una información falsa van a recibir las consecuencias penales de quien tuvo cierta complicidad".
Cuando la interrogaron por los posibles indicios en torno a quienes fueron los responsables de dar información “falsa”, Bullrich aseveró: “Nosotros tenemos los indicios y los vamos a investigar”.
Hacia el final de sus declaraciones confesó: "Algunos dirán que por seguir pistas falsas quedamos como tontos". A confesión de partes…
Las explicaciones de la ministra oscurecen el ya turbio escenario en el que se viene desarrollando la fuga de los condenados por el triple crimen. Los prófugos no tienen poderes “mágicos”, sino una complicidad y colaboración policial y política (no solo en la provincia), de parte de las estructuras de las fuerzas de seguridad que se desarrollaron al amparo tanto del gobierno saliente, como ahora bajo la administración Cambiemos (y ahora también la sospecha cae nuevamente sobre la policía de la administración “socialista” de Santa Fe).
A esto se suma el bochorno del gobierno que quería mostrar un “éxito” frente a la crisis abierta por la fuga y anunció capturas “inminentes” y ahora efectivas que nunca fueron.
Las aclaraciones de Bullrich oscurecen el panorama. |