La pregunta del enojo fue realizada por el periodista del diario BAE, Alejandro Bercovich, la misma hacia referencia a si la detención de la dirigente de la Tupac Amaru, Milagro Sala, podía molestar a alguno de los empresarios reunidos de Davos por "encarcelar a una líder opositora" y comparó la situación a la del líder opositor venezolano Leopoldo López, puesto en prisión por Nicolás Maduro.
A lo que el presidente respondió indignado: "¿Me lo estás diciendo en serio? No. No me lo podés decir en serio. ¡No me podés comparar a Leopoldo López con Milagro Sala! López no hizo nada malo como para que lo compares con Milagro Sala". Lo "malo" que hizo Sala, según se desprende de los motivos de la denuncia que llevó a su detención, es la protesta social. Por eso la respuesta de Macri es una nueva demostración de que la detención de Sala responde a una clara intención de criminalizar la protesta y un intento de aleccionar a todos aquellos que se dispongan a enfrentar el ajuste en curso.
Tal fue la indignación del presidente argentino, que luego de su respuesta dio por finalizada la conferencia de prensa.
Ya en declaraciones anteriores Macri había respaldado a Morales, gobernador de Jujuy, en su ataque a la dirigente social. Como también celebró la decisión de los jueces de mantener detenida a Sala. “Si ellos (por los jueces) creen que se viola la ley, no tiene que haber favoritismos por más poderosos que sean a los que juzgan, como el caso de Milagro Sala” sentenció. | 
