Foto: Juan Carlos Mohr @juancarlosmohr
Un nutrido grupo de activistas de la Plataforma Anti Desahucios (PAH) y otros movimientos sociales de Madrid, han ocupado en la mañana de este jueves una sucursal de Bankia en una céntrica calle de Madrid para exigir la “inmediata paralización de los desahucios”.
Más de un centenar de personas, miembros de las plataformas y los movimientos sociales relacionados con la lucha por la vivienda, con camisetas verdes de la PAH, antifaces y carteles con los lemas “Dación en pago” o “Stop Desahucios”, habían acudido a la sede de Bankia cita en la calle Mayor número 18. Una pancarta desplegada a la entrada de la sucursal rezaba: “Tenemos las llaves de todas las casas”.
Este fue el contexto en el que Amalia Blanco, directiva del banco, agradeció en un tuit enviado desde su cuenta persona un llamado del Ayuntamiento de Madrid rechazando la ocupación.
Amalia Blanco es Directora General de Comunicación y Relaciones Externas de Bankia desde mayo de 2012, según consta en su cuenta de Linkedin. Además, es presidenta de la multimillonaria productora de cine “A Contracorriente Films”. Aunque la señora, es evidente, no va muy “contra la corriente” que digamos.
Blanco comenzó su carrera profesional en Arthur Andersen -una de las cinco mayores compañías auditoras del mundo- y tiene una dilatada experiencia tanto en banca, donde fue auditora interna y controller de Santander Investment durante 10 años, como en comunicación de grandes empresas como Ferrovial y Gamesa.
Pocas horas más tarde del agradecimiento público de la directiva de Bankia al Ayuntamiento, una veintena de policías nacionales arribaron a la céntrica sede del banco, procedieron a identificar a los ocupantes e iniciaron una carga contra los manifestantes con el resultado de tres personas detenidas y una hospitalizada como consecuencia de estas cargas.
Según ha contado Manuel San Pastor, abogado de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, al diario Público, la persona herida es una mujer discapacitada, que iba en silla de ruedas y había sido desahuciada. A última hora de la tarde, varios efectivos de la policía permanecían en las proximidades de la sucursal.
Desde el Ayuntamiento de Madrid nadie desmintió el llamado al que alude Blanco. Por el contrario, por la tarde, la concejala de Equidad, Derechos Sociales y Empleo del Ayuntamiento, Marta Higueras, ha declarado a Europa Press que el Gobierno municipal “no está de acuerdo” con la ocupación. Una posición que, en los hechos, dejo vía libre al accionar represivo de la Policía Nacional, ante la cual el Ayuntamiento ni siquiera se propuso mediar.
La actitud que no sorprende, considerando la posición reaccionaria que mantuvo ante el caso de los titiriteros detenidos el pasado sábado, pero indigna sobremanera. Especialmente cuando la lucha contra los desahucios y su paralización fue una de las grandes promesas de Ahora Madrid durante su campaña electoral.
En un comunicado de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), los activistas explican que “A pesar de los miles de pisos vacíos que posee la entidad, éstos no pasan al Fondo Social de Viviendas, y según reconoce la propia Bankia no disponen de ningún piso en el municipio de Madrid”.
Sus reclamos son sencillos y justos: inmediata paralización de varios desahucios previstos para los próximos días; negociación de alquiler social; retirada de las denuncias por usurpación a quienes están negociando un alquiler social tras haber recuperado una vivienda vacía; localización detallada de los pisos del Fondo Social de Viviendas en Madrid y apertura de una mesa de negociación que permita estudiar la cesión de un porcentaje importante de los pisos vacíos de la entidad, en la que participe los gobiernos local y regional.
Pero los activistas de la PAH están lejos de contar con el apoyo del “Ayuntamiento del cambio”. En el mismo comunicado, aseguran que después de la campaña electoral no han vuelto a saber “de las promesas y buenas perspectivas que hizo públicas la alcaldesa Manuela Carmena tras su inmediata reunión con Bankia nada más salir elegida. Tampoco tenemos noticias concretas del supuesto acuerdo alcanzado por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, con la entidad rescatada, ni si, por motivos políticos, la parte que correspondería al término municipal de Madrid no se está traspasando”.
En los discursos de campaña, Ahora Madrid prometía que los desahucios serían impedidos y recuperado el parque de viviendas público que había sido malvendido a fondos buitre para facilitar su especulación capitalista. Incluso recuerdan que tanto la corporación municipal como autonómica firmaron su compromiso expreso con la campaña “Las 5 de la PAH”, por la que se obligaban a poner en circulación los pisos vacíos de las entidades rescatadas. Pero todo esto ha quedado en puro discurso.
O, mejor dicho, en un doble discurso, donde el relato del “cambio” y lo “nuevo” queda opacado por la asunción de un discurso político neoliberal de respeto a la legalidad capitalista y el recurso de la represión estatal como mecanismo para mantener el orden.
El miércoles, en la manifestación que tuvo lugar frente al Ayuntamiento de Madrid, conversábamos con varios compañeros sobre la gravedad de la detención de los titiriteros, un ataque inusitado contra la libertad de expresión. Y nos preguntábamos, ¿qué sucederá cuando vuelvan las luchas duras como la de Panrico o Coca-Cola o, aún más, las tomas de empresas y establecimientos? Pues ya podemos comenzar a hacernos una idea sobre qué lado de la barricada va a elegir el “Ayuntamiento del cambio” liderado por Manuela Carmena. |