La diputada nacional por el Frente de Izquierda, Myriam Bregman, impulsa en estos días un pedido de interpelación a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich. El pedido es para que dé explicaciones en el Congreso nacional sobre la represión contra la murga del Bajo Flores el pasado 29 de enero.
La represión por parte de efectivos de Gendarmería a la murga “Los auténticos reyes del ritmo” en el Bajo Flores dejó un saldo de 16 chicos heridos, varios de ellos hospitalizados durante días debido a la gravedad de las heridas. Fueron heridos también varios adultos y se denuncia no sólo la utilización de balas de goma sino también de plomo. Un hecho de una gravedad extrema, amparado en la creciente impunidad que tiene esta y todas las fuerzas de seguridad, por parte de funcionarios que avalan este accionar de manera sistemática.
Las únicas, y lamentables, apariciones públicas de la Ministra con respecto a este grave hecho fueron para confundir y sembrar sospechas sobre los propios integrantes de la murga. Haber ido a fotografiarse en el Hospital Churruca junto a gendarmes que supuestamente habían sido baleados esa misma noche del 29 de enero, es una clara provocación. El hecho en el que presuntamente fueron baleados los gendarmes no fue aclarado nunca y existen serias sospechas y denuncias de los vecinos que señalan que los efectivos de Gendarmería no sufrieron herida alguna en el lugar en el que la murga realizaba sus ensayos. Allí sólo fueron heridos niños, madres, padres y familiares que estaban en el lugar.
El duro testimonio de una abuela, que participó de la marcha en la que se repudió la represión, es una muestra inequívoca de lo grave que resultaron los hechos que implican a Bullrich y las fuerzas de seguridad a su cargo. “A mi nieta le pegaron tres balazos. ¿Qué clase de democracia estamos viviendo? Macri no nos quiere a los pobres, que se vaya. El jefe de Gendarmería dijo que Macri no quería nuevas murgas. Parece que los chicos de las villas no tienen derecho a divertirse”.
El rol de los medios de comunicación cooptados por el gobierno fue una vez más justificar la represión y sostener la versión de las fuerzas de seguridad, titulando la noticia, en el caso de Clarín: “Dos gendarmes fueron baleados durante un operativo en la villa 1-11-14”.
La propia Procuvin (Procuraduría contra la Violencia Institucional), realizó una fuerte denuncia, al señalar que "coincidieron los tres testimonios recibidos hoy -dos de ellos por parte de quienes serían víctimas- en la sede del programa de la Agencia Territorial de Acceso a la Justicia (ATAJO) del Bajo Flores, un grupo de personas se encontraba ensayando en una murga barrial cuando la Gendarmería irrumpió con violencia en la zona. Las declaraciones de los testigos detallaron que la Gendarmería avanzó sobre los vecinos y disparó en una zona donde había niños y adolescentes. Hasta el momento no hay elementos que indiquen que las personas agredidas tuvieran armas, ni que los gendarmes hayan sido heridos en el contexto de la represión denunciada ante el Ministerio Público Fiscal".
Es por eso que desde la banca de Myriam Bregman, con el acompañamiento de los diputados Alcira Argumedo (Proyecto Sur), Lucila de Ponti (FpV), Néstor Pitrola, Pablo López y Soledad Sosa (PO-FIT) se reclaman urgentes explicaciones por parte de Bullrich, para que este caso no quede impune. En el mismo sentido, Patricio del Corro, legislador porteño del PTS en el FIT, presentó en la legislatura un pedido de informes al ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires porque no se sabe siquiera quién dio la orden de accionar contra los chicos y sus familias y vecinos. |