Por más que el discurso se vista de seda, la verdad de hierro es que el acceso a un sistema de salud para la gran mayoría de la población trabajadora y de menores ingresos, en esta última década continúa siendo una carrera de obstáculos a superar tan sólo por el esfuerzo de los que dependen de este sistema público para atenderse y de sus profesionales y trabajadores en general, que a pesar de las carencias brindar una buena atención.
El sistema de atención de salud está compuesto por tres subsectores que son el Público, Obras Sociales y Sector Privado.
El Sector Público arrastra otro de los efectos noventistas: la descentralización hacia las provincias y municipios con una vasta heterogeneidad en las modalidades de atención, recursos y posibilidades de eficiencia en la provisión de los servicios de salud.
Esta lógica imperante en las décadas neoliberales, abarcó a toda la región del cono sur, con sus diferentes matices, profundizando una estratificación donde cada uno tiene derecho a lo que puede pagar. Esto, que es el ABC de la privatización continuó incólume en la “década ganada” que sólo lo fue para las empresas dueñas de prepagas, industria farmacéutica, laboratorios, etc. En definitiva el llamado complejo médico industrial.
Luego están los subsistemas de las Obras Sociales y el Sistema Privado. Sin embargo tanto el público como las Obras Sociales son los que acumulan más deterioro y deben satisfacer a la vasta mayoría de la población en contraste absoluto con el sector privado que atiende a solo 6 millones de personas.
Lo que estamos analizando en estas líneas afecta duramente a trabajadores y a los sectores más pobres que son los que padecen estas políticas estatales en su vida cotidiana y que muchas veces hace a la vida o muerte de esa población.
En el video podemos observar cómo también está naturalizado, en inmensos sectores del pueblo trabajador que carece de cobertura, que la atención médica no es un derecho a exigir sino algo a padecer tragándose un cúmulo de frustraciones y luego de mucho esfuerzo, poder acceder. Esta naturalización es una herencia de los 90 neoliberales, que en más de una década los gobiernos kirchneristas no revirtieron, sencillamente porque continuaron dando vía libre a la mercantilización de la salud.
La ruta de acceso al Hospital Público
Nuestro informe en el Hospital Posadas, es un botón de muestra del maltrato del Estado, como consecuencia de las políticas del gobierno “nacional y popular”.
Como denunciara Juan Carlos Porto presidente de la CICOp del hospital San Martín, todo se vuelve cuesta arriba para las familias trabajadoras tratándose de cuidar su salud.
¿Quiénes garantizan la salud de la población?
Asimismo si bien las causas sociales de esta situación están en la lógica mercantil de la organización de nuestra sociedad, en lo que a la atención médica se refiere, es necesario bregar por un sistema de la salud único gratuito integral y de calidad para toda la población.
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