Fotografía: Esquerda-Diario
La investigación, que se realizará bajo secreto de sumario a cargo de la Justicia, se basa en declaraciones de la periodista Mirian Dutra, al diario Folha de Sao Paulo, en la cual afirmó que el ex presidente, con quien tuvo un romance extraconyugal, firmó un contrato ficticio con la empresa Brasif Exportação e Importação S.A. por la cual recibió US$ 3 mil mensuales entre 2002 y 2006. Según Dutra, el ex presidente le habría enviado, utilizando cuentas en el exterior, dinero para mantenerse ella y su hijo Tomás en el extranjero mientras aún gobernaba el país.
La periodista también afirmó que llegó a ser "exiliada" (como ella misma lo llama), pues habría sufrido presiones políticas para no volver a Brasil durante la época en que FHC disputaba la reelección, ya que esto podría perjudicarle. El ex presidente admitió tener cuentas en el exterior y haber dado un departamento de 200 mil euros a Tomás, hijo de Mirian, pero negó haber cometido irregularidades, negando además haber participado del contrato de la empresa Brasif con Mirian.
La empresa Brasif era concesionaria de las tiendas de free shop en varios aeropuertos brasileros hasta el año 2006 y en la actualidad opera en diferentes ramos (venta y alquiler de maquinaria pesada; biotecnología; agricultura y la ganadería, emprendimientos e inversiones inmobiliarias). La compañía no perdió tiempo en salir en defensa del ex presidente y se anticipó buscando salvarlo de la denuncia, divulgando un comunicado en el que indica que FHC no estuvo involucrado en la contratación de Mirian Dutra.
Por su parte, en un comunicado, el coordinador jurídico del opositor PSDB (partido al que pertenece Cardoso), el diputado Carlos Sampaio, afirmó: "La omisión flagrante del Ministerio de Justicia desde el inicio de la Operación Lava-Jato contrasta ahora, con la actuación fuerte del ministro [de Justicia] José Eduardo Cardozo en dar curso rápido a la apertura de de una investigación policial contra el ex presidente por cuestiones de naturaleza exclusivamente personal” como si por ser de “naturaleza personal” estuviese exento de delitos. Sabemos que no es el caso, y debería ser investigado en forma inmediata, independiente de su naturaleza.
En cada nueva denuncia de los muchos casos de corrupción y malversación de fondos que surgen a diario en el país, queda claro que están involucrados todos los partidos de la burguesía, sea el PT, el PSDB o el PMDB junto a empresas, bancos, grandes multinacionales locales y extranjeras. Este es sólo uno de muchos otros casos y, lamentablemente, sabemos que no será el último. El mes pasado desde Esquera Diário denunciamos otro caso que involucraba al ex presidente en la venta de la petrolera argentina en 2002, en el que su gobierno está siendo acusado de recibir sobornos de US$ 100 millones.
El PSDB ha venido utilizando la estrategia de buscar imponer la agenda del impeachment (Juicio Político) a la presidenta Dilma Rousseff, intentado aparecer como un partido "limpio de corrupción". Pero las últimas denuncias de la Operación Lava-Jato (sobre los escándalos de corrupción en Petrobras) que involucran al PSDB son un indicador de cuánto este partido está viéndose afectado. Es el mismo partido que venía utilizando los resultados del Lava-Jato para justificar el impeachment, aunque comparta el plan de medidas y de ajuste aplicado por el gobierno del PT.
La conclusión de toda esta lamentable situación es que la corrupción es necesaria para que la burguesía pueda garantizar sus ganancias, al mismo tiempo en que favorece los privilegios de los políticos, quienes gobiernan defendiendo sus intereses.
Por esto, la única salida capaz de acabar con esta corrupción política, con todos los partidos involucrados en los esquemas de corrupción y que controlan el Congreso, es avanzar para que los trabajadores y la juventud se conviertan en sujetos políticos para reorganizar el país y sacar las manos de estos corruptos del país. Los que roban los fondos públicos son los mismos que atacan las condiciones de vida y los derechos de los trabajadores y el pueblo pobre a cambio de su beneficio individual, mayores ganancias para los bancos y los empresarios.
Es necesario luchar por poner en pie una Asamblea Constituyente impuesta por la movilización popular, independiente de los gobiernos, de la oposición de derecha y el PT, e imponer una Comisión de investigación independiente de la Justicia burguesa para esclarecer los casos de corrupción y malversación de fondos en el país, compuesta por trabajadores y la juventud, para investigar hasta el final, castigar a todos los implicados y devolver el dinero robado a las arcas públicas, con la confiscación de los bienes que estos políticos se robaron. |
