La ordenanza tiene el objetivo de perseguir y confiscar mercadería. Ningún beneficio para los trabajadores precarizados. La banca del PTS/FIT la única que votó en contra de este proyecto.
En los fundamentos del proyecto, la UCR reconoce la situación económica de nuestro país, el ajuste, los despidos, los tarifazos, etc. Y encuentran en esta situación la causa de “la proliferación de los vendedores ambulantes”.
Los radicales entienden que su política de ajuste “conlleva a la búsqueda de salida laboral de algunos vecinos de Godoy Cruz, modelando esto, una actividad clandestina de la que dependen muchas familias, como única fuente de ingresos.”
Pero lejos de querer dar una solución que beneficie a estos trabajadores precarizados, uno de los principales fundamentos del proyecto es que “se hace necesario regular dicha actividad para evitar que los peatones se vean perjudicados en su libre circulación por las veredas de Godoy Cruz.”
Cuando se implemente la ordenanza, los vendedores ambulantes van a tener que tramitar un permiso y pagar tasas municipales. Y los que no cumplan con toda la serie de requisitos reglamentados, “serán objeto del decomiso de la mercadería y la inmediata exclusión del registro municipal de vendedores ambulantes autorizados.”
No podíamos esperar otra cosa de los radicales godoycruceños. Recordemos la política de su correligionario el Viti Fayad, que reprimió y desalojó a los vendedores ambulantes de la Ciudad y que los acosó sistemáticamente mientras duró su gobierno.
Por su parte, el par de concejales del FpV, que en algunas oportunidades se oponen a los proyectos del bloque oficialista de la municipalidad, en esta ocasión acompañaron el proyecto. La banca del PTS/FIT fue la única que votó en contra de esta ordenanza y fundamentó en defensa de los vendedores ambulantes. |