Esto ocurre en el marco de la carrera a la Casa Blanca, donde los gobernadores republicanos han tomado la agenda de la derecha tras la histórica resolución de la Corte Suprema de ese país que el año pasado legalizó el matrimonio homosexual en todo el territorio estadounidense.
En Misisipi, el gobernador Phil Bryant firmó un proyecto de ley que legaliza el odio. Entraría en vigencia a partir del primero de julio del presente año, permitiendo a los propietarios de comercios y a los funcionarios públicos no atender a comunidad de lesbianas, gays y personas trans o bisexuales (LGTB), en base a sus creencias religiosas, lo que ha desencadenado críticas por parte de la población, artistas y militantes de derechos humanos.
La ley hb 1523 conocida como "Ley de libertad religiosa" establece la posibilidad de no prestar servicios a la comunidad LGTB debido a creencias religiosas o morales. Estas son enumeradas como: (a) El matrimonio es o debería ser reconocido como la unión de un hombre y una mujer; (b) Las relaciones sexuales están debidamente reservados a tal matrimonio; y (c) Male (hombre) o hembra (mujer) se refieren a un sexo biológico inmutable del individuo determinado objetivamente por la anatomía y genética en el momento de su nacimiento.
Phil Bryant instaura, con esta medida, la legalización del odio y la discriminación, dejando asentado además que no tomarán medidas ante la abstención de formalizar cualquier matrimonio, o de prestación de servicios, alojamiento, etc. que estén relacionados con la la formación, celebración o el reconocimiento de dicho vínculo.
Se legalizaría de esta forma, además, que se realicen despidos discriminatorios, o la no contratación de personas del colectivo LGTB, que se niegue la prestación de servicios esenciales, entre otras consecuencias.
Esta ley es similar a la vetada por Nathan Deal, gobernador de Georgia, quien comunicó este 28 de marzo que ejercía su derecho a veto y no promulgaba la ley ante el repudio de la comunidad por la vulneración de derechos elementales que se buscaba establecer.
En el estado de Carolina del Norte, el gobernador Pat McCrory promulgó una ley que establece que las personas deben utilizar los baños en concordancia con su sexo biológico. Su fundamento es “buscar atacar a los depredadores sexuales”. Usando el fantasma inventado de “depredador sexual disfrazado de mujer” contra las mujeres trans, esta ley no solo niega la identidad de género y criminaliza a un sector de la población por su orientación sexual, sino que va mucho más allá derogando todas las disposiciones antidiscriminatorias.
Abogados especializados en leyes laborales en un artículo de opinión en Raleigh N & O , explicaron que si bien se mantiene una política estatal que prohíbe que un trabajador sea discriminado por su religión, raza, color, nacionalidad, edad, sexo o discapacidad, la nueva ley ha eliminado la posibilidad de que los empleados demanden a sus empleadores por prácticas discriminatorias en las cortes estatales, restringiendo de esta forma el acceso a la justicia, lo que afecta principalmente a las personas de bajos recursos .
Por su parte, el gobernador de Kansas, Sam Brownback, ha promulgado también una ley motivada por esa supuesta defensa de la libertad religiosa, que permitirá negar el acceso a la educación a quienes “no se adhieran a las convicciones religiosas de la asociación” incluso en instituciones financiadas mayoritariamente con fondos públicos. La excusa del gobernador para la promulgación es que “la libertad religiosa es parte de lo que somos como nación y como estado”.
Convulsión social
Las primeras repercusiones se hicieron notar en redes sociales lanzaron una campaña de selfies contra estas medidas, además de marchas y sentadas. Figuras reconocidas en la lucha por los derechos humanos en Estados Unidos como Derrick Johnson (Presidente del Estado de la Conferencia NAACP del Estado de Mississippi) manifestaron su solidaridad con la comunidad LGTB y repudio por esta legislación comparándolo con la discriminación que ha sufrido históricamente la comunidad afroamericana en el país.
Algunas empresas multinacionales como PayPal, American Airlines, Apple, Bank of America, Facebook, Google, IBM, Microsoft, Disney, Marvell, Microsoft, la liga de fútbol americano (NFL), netflix, Twitter y Yahoo se han posicionado en contra de las normativas y han firmado una carta de repudio (en Carolina del norte) o anunciado que retirarían inversiones en los estados (como en Kansas o Georgia). Muchas de esas empresas financian campañas electorales de algunos de los candidatos y además cuentan con denuncias en diferentes sucursales por tener prácticas discriminatorias, pero la repercusión social y el repudio ante el avance discriminatorio fue tal que no pudieron más que manifestarse en contra. XHamster.com es una de las páginas pornográficas más vistas en Estados Unidos. Este martes 12 de marzo decidió bloquear el acceso a su sitio como protesta por la HB2.
Cosas más importantes que el rock
Bryan Adams al igual que el cantante Bruce Springsteen se han negado a celebrar sus conciertos en estos estados.
Springsteen emitió un comunicado explicando que él y la E Street Band no tocarían para "mostrar solidaridad por los defensores de la libertad" y en protesta contra la ley de Carolina del Norte
La NBA publico en su twiter oficial que considerará cambiar el lugar de un partido All-Star con fecha para el 2017 si esto no cambia. Dicen que "el compromiso a tener un ambiente inclusivo" para sus juegos NO se ve garantizado por estas nuevas leyes.
Entre la sociedad, el apoyo al matrimonio igualitario aumentó más de 20 puntos en menos de una década, según Gallup. Esta evolución es mucho más rápida que la que dio lugar a avances en la regulación del aborto o el movimiento por los derechos civiles y ha sido recibida con el mismo abanico de normativas que intentan restringir su avance. A pesar de que un 60% de los estadounidenses respalda el matrimonio igualitario, el rechazo sigue siendo especialmente fuerte entre los que se oponen. Y en pleno año electoral, varios Estados con gobiernos republicanos podrían expandir una iniciativa que ya ha arraigado especialmente en el Sur del país y aprovechar la movilización de este sector para atraer su voto en noviembre.
Desde Human Rigths Campaign denunciaron que existen cerca de 200 proyectos de ley discriminatorios contra el colectivo LGTBI, que afectan a 32 estados de los Estados Unidos, aún pendientes de resolución. Por lo que esperan que el intento de avance sobre las libertades democráticas de la comunidad LGTBQ continúe a lo largo del año. Como se ha mostrado en los estados donde no lograron imponer la normativa es la organización no solo del colectivo afectado, sino en solidaridad con el resto de la sociedad lo que puede frenar el avance de la legislación reaccionaria. |