La noticia conmovió al mundo de la música. Prince falleció ayer con apenas 57 años y una prolífica carrera que dejó su impronta en generaciones de artistas, a través de una obra innovadora que rompió normas estéticas y musicales.
Prince Rogers Nelson había nacido el 7 de junio de 1958 en Minneapolis, la ciudad más poblada del estado de Minnesota, tierra que lo vio morir ayer. Sus padres también fueron músicos. John L. Nelson y Mattie Shaw integraron la banda llamada Prince Rogers Trio. De allí Prince tomó su nombre artístico.
En 1978 grabó su primer disco, "For You", en el que todas las canciones están compuestas por él y toca todos los instrumentos que se escuchan en el disco. Nacía "la esperanza negra".
Prince fue un multiinstrumentista, abiertamente inspirado en Jimi Hendrix y con una voz particular que al cantar pasaba de un grito nasal a un falsete erótico. Tocaba guitarra, bajo, piano, teclados, sintetizador, clavinet, batería, percusión, saxofón y armónica, entre otros instrumentos.
Con mas de 30 albumes de estudio, Prince mezcló el rock, el soul, el funk, el rhythm and blues y el new wave, dando origen a lo que se llamó el "Minneapolis sound" o "sonido Mienneapolis". Un genero también conocido como funk rock desarrollado hacia finales de los años ’70 al que adhidieron luego distintas bandas y músicos como The Time, Jimmy Jam and Terry Lewis, Morris Day, Vanity 6, Teena Marie, Apollonia 6, Ta Mara & the Seen, Sheila E., Jesse Johnson, Brownmark, Mazarati y The Family.
El tercer álbum de Prince, Dirty Mind (1980), es considerado la primera exposición del género.
Pero fue en 1984 cuando Prince alcanzó popularidad con la salida de su album "Purple Rain" (LLuvia Púrpura) y la película que lleva el mismo nombre con el músico como protagonista Ese año además, ganó el Oscar a Mejor Banda Sonora. Es que simultáneamente a su producción discográfica, desarrolló su intervención en el cine, tanto como actor, director y creando bandas sonoras. Un ejemplo fue su disco "Batman", undécimo álbum del músico norteamericano lanzado en 1989 como banda sonora original de la película homónima de ese mismo año, dirigida por Tim Burton.
A la hora de vestirse, Prince jugaba con la fusión entre los géneros. Desarrollo hasta niveles provocativos, la experimentación de la androginia con la que ya había jugado el glam en los 70 con David Bowie como uno de sus exponentes. En la portada de disco Lovesexy (1988) aparecía completamente desnudo, recostado entre flores gigantes y con una pose plenamente femenina. A lo largo de su carrera jugó el maquillaje, su barba, con la bisutería, la lencería, el cuero, las pieles, los tacos y la estética del rock.
Esa estética andrógina fue plasmada en el símbolo que lo idenfiticó, una combinación del femenino y el masculino, pero también con una mitad de jeroglífico de inspiración egipcia, muy propio del rap y el funky de los 80.
En 1993, en medio de litigios con su antigua discográfica no podía emplear su nombre artístico para ninguna acción comercial. Por eso optó por hacerse llamar TAFKAP (El Artista Anteriormente Conocido Como Prince) y adoptó de nombre este símbolo impronunciable.
Baltimore
Hace casi un año, el 10 de mayo de 2015, Prince realizaba un recital en Baltimore en homenaje al joven Freddie Gray cuyo asesinato en manos de la policía dio origen al movimiento Black Lives Matter . Precisamente, una de sus canciones que compuso en homenaje se llamo "Baltimore".
Spinetta y Charly García sobre Prince
En la Argentina tuvo sus grandes admiradores en el mundo de la música. A propósito del polémico y breve recital de apenas 77 minutos que da en "Monumental" de River en 1991, Luis Alberto Spinetta dijo: "Prince es un músico avanzado. Pude comprobarlo en la prueba de sonido, sin una persona en el estadio y me volví loco. Quizá a mucha gente se le haga incomprensible su música, pero a mí me deslumbró".
Pero seguramente, el músico argentino que más tomó la influencia de Prince fue Charly García, como puede apreciarse en un tema como "Fanky" del album "Como conseguir chicas" de 1989. A propósitco de aquel recital de Prince en Buenos Aires, Charly dijo: "No me parece nada nuevo; hace rato que lo conozco. Que haya tocado en Buenos Aires me parece un milagro. Para mí no fue corto, si seguía me desmayaba. Fue demasiado, para muestra basta un botón. Él es un verdadero transgresor, se puede tomar atribuciones de cualquier tipo. Yo tenía miedo, soy fanático de Prince. El es el mejor músico del mundo. El que hable mal de Prince se las va a tener que ver conmigo".
Muchos recuerdan como el último gran concierto de Prince, el realizado en 2007, antes de la final de la Liga Nacional de Football Americano en Miami que apenas duró 12 minutos. Bastaron para que Prince desplegara su potencia musical en una puesta en escena impactante que cerró con una versión de su clásico "Purple Rain", nada menos que bajo una lluvia torrencial.