La Academia sufrió para ganó 3 puntos valiosos por el trámite del partido: terminó con dos menos por expulsiones de Roger Martínez (autor del gol) y de Cabral. Resistió como pudo y mantuvo el 1-0.
Ninguno de los dos jugaba por nada trascendente, ya muy lejos de la punta de la zona 2, que tiene a Lanús como cómodo dueño. Pero es un clásico que vale la pena ganar. No casualmente fue el elegido por el cine para traer un Oscar, con “El secreto de sus ojos”.
Los dos técnicos plantaron equipos alternativos porque tienen a la Libertadores como prioridad. Pese a eso, el partido fue de ida y vuelta, con muchas llegadas. Digno de una película. El gran conductor fue Diego Milito, el ídolo que muy de a poco se va despidiendo a la altura de su carrera.
Fue a los 33 minutos cuando Roger Martínez rompió la paridad en el Palacio Ducó con una contra a la carrera.
El Globo no se quedó mirando y buscó, sobre todo cuando en el segundo tiempo se fue expulsado el colombiano Martínez (una patada descalificadora a Araujo) y luego Cabral por doble amarilla. Era la oportunidad para el Globo, pero Racing “resistió con aguante” (lo ayudó el travesaño a los 20 minutos cuando se estrelló un pelotazo de Bogado) y terminó triunfador.
Ahora tanto la Academia como el Globo quedan a la espera de la revancha de sus compromisos por Copa Libertadores, el principal objetivo de ambos.