La resistencia de la empresa se da en el marco en que el próximo 10 de mayo se realizarán elecciones generales en el Sindicato de la Alimentación (STIA) que conduce Rodolfo Daer, y Coria es referente de la agrupación Bordó que en las elecciones pasadas obtuvo el 40 % de los votos, conformando una extendida oposición en el gremio que ahora se dispone a disputar su conducción, por lo que la empresa pretende de este modo favorecer a Daer en las elecciones.
El Juzgado del Trabajo Nº 79, a cargo del Dr. Elio Plaisant declaró la nulidad del despido de Coria por discriminatorio y ordeno su reinstalación, sentencia que se suma a las 7 resoluciones judiciales que declaran la discriminación de Kraft (hoy Mondelez) contra los trabajadores. Los abogados de la empresa apelaron, pero lo hicieron de manera extemporánea por lo que el 10 de octubre del 2015 el juzgado rechazo su apelación.
El pasado 29 de marzo de 2016, ante la negativa de la empresa, el juez la intimó a efectivizar la reinstalación de Coria en su puesto, pero sorprendentemente con chicanas procesales insostenibles, la empresa argumento que no se había enterado de la resolución de octubre del año pasado que declaró extemporánea su apelación.
El juzgado hizo lugar a su planteo pero sin tener en cuenta que de las constancias de la causa surge que Mondelez estaba notificada hacía ya 6 meses, logrando la empresa con estas maniobras dilatar la reinstalación de uno de los referentes de la agrupación Bordo de la Alimentación para evitar su participación en las elecciones del próximo 10 de mayo.
Ya el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, presentó por escrito su preocupación ante el juzgado, y organismos de Derechos Humanos han expresado la misma preocupación por la policita de la empresa en el caso de Coria.
Desde el CeProDH, reclamamos que la empresa desista de sus maniobras dilatorias y cumpla, de una vez por todas, con la sentencia de reinstalación de Oscar Coria en su puesto de trabajo. | 
