La región de La Plata, Berisso y Ensenada no está ajena a la situación nacional. A días del veto a la ley "antidespidos" se profundizan los ataques de las patronales hacia los trabajadores de la zona. Los obreros se encuentran resistiendo, apostando a la coordinación de las luchas, la solidaridad y la unidad con los estudiantes.
Ante el ajuste y los despidos: Unidad desde abajo
Los patrones de Emapi, Gleba y Copetro se ven amparados por las políticas del gobierno de Macri en el que no hay ningún tipo de límites a los ataques contra los trabajadores. Esto sumado a una inflación creciente y el aumento en las tarifas de servicios vuelve al centro de la escena la preocupación por la pérdida de empleo.
Los métodos de los trabajadores para enfrentar los ataques no se hacen esperar: paralizar la planta, bloquear los portones como en Emapi y Copetro, cortes de avenidas como en Gleba, son una clara muestra de las peleas que están dispuestos a dar frente a las empresas que despiden y ante la tregua de las burocracias sindicales.
Además de estas medidas los trabajadores dieron un paso más hacia la coordinación forjando la unidad desde abajo. Esto se vio reflejado durante el fin de semana cuando se produjo el intercambio de delegaciones que se visitaron en las puertas de sus respectivas fábricas, para discutir y fortalecer la unidad de las luchas.
Un gesto vale más que mil palabras
La lluvia y el mal tiempo no pudo opacar el buen clima en los acampes que continúan rodeados del apoyo de delegaciones obreras y estudiantiles. Un grupo de trabajadores de Copetro se acercó a las puertas de la fábrica Gleba a llevar su solidaridad con el conflicto. La respuesta no fue solo un cálido recibimiento sino que además los trabajadores de Gleba donaron a los de Copetro un baúl lleno de mercadería para que puedan sostener la medida por los próximos días: “Esperen compañeros, abran el baúl del auto, que hasta que no esté lleno no se van. Ustedes lo necesitan igual que nosotros para bancar la lucha”. | 
