El Índice de Precios Minoristas Nacional Urbano (IPCNU) arrojó una variación 1,4% en septiembre. Al considerarse la variación de precios entre enero y septiembre la inflación oficial es 19,8%.
Los rubros que más crecieron durante septiembre fueron otros bienes y servicios (2,5%; incluye cigarrillos), indumentaria (1,9%), atención médica y gastos para la salud (1,5%), transporte y comunicaciones (1,5%) y esparcimiento (1,5%).
El IPCNU se comenzó a publicar en enero de este año. Es la primera vez en la historia que se construye un índice de alcance nacional. Su puesta en funcionamiento fue acordada con el Fondo Monetario Internacional, que seguirá supervisando su funcionamiento.
En los primeros meses del año, a pesar de diferir de los cálculos privados, el IPCNU había generado la expectativa que el gobierno iba a dejar de dibujar el nivel de inflación luego de que Guillermo Moreno abandonara su cargo de secretario de Comercio.
No obstante, llegado septiembre, el nuevo índice del INDEC se aleja cada vez más de la realidad. Como en todos los últimos años el gobierno utiliza el nivel de inflación manipulado para exhibir una ficción sobre la mejora del poder de compra de los trabajadores.
Es lo que hizo el nuevo secretario de Comercio, Augusto Costa, que en las horas previas a la difusión del índice oficial por parte del INDEC, señaló en declaraciones a Radio América que “para nosotros no hubo pérdida de salario real”. A lo que agregó que hay “una desaceleración de los precios”.
Las declaraciones de Costa fueron una respuesta a la difusión que el día martes habían realizado legisladores de la oposición patronal (PRO, UCR, FAUNEN, peronismo disidente, etc) del IPC Congreso que exhibió un aumento de 2,45% en septiembre, acumulando una suba de 29,8% entre enero y septiembre.
Durante la tarde, la declaración de Costa fue desmentida por la propia difusión oficial de los datos del INDEC que arrojó un aceleramiento del incremento de precios: mientras que en agosto la inflación fue 1,3% en septiembre creció 1,4%.
Las afirmaciones del secretario de Comercio son desmentidas incluso por organizaciones afines al gobierno, como el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA) de la CTA oficialista, que estima una pérdida de poder adquisitivo de los salarios de 7% en lo que va del año.
También la estimación de la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, única oficial (provisoria) difundida hasta el momento, arroja un aumento de 2,2% para septiembre, con un incremento que llega al 31,1% en los primeros nueve meses del año y del 40,3% en relación con setiembre de 2013.
En la tarde del miércoles las trabajadoras y trabajadores del INDEC organizados en ATE volvieron a denunciar, una vez más, la intervención que manipula las estadísticas públicas.
El panorama económico recesivo no logró detener el avance en la remarcación de precios que hacen las patronales como las alimenticias o las de indumentaria, pero que también es avalado por el gobierno con la autorización de los aumentos de naftas, los tarifazos en el transporte, el gas y el agua. La oposición patronal (PRO, UCR, FAUNEN, peronismo disidente, etc) que denuncia la manipulación de los índices es tan o más anti-obrera que el oficialismo que dibuja los índices. La recomposición del salario es un reclamo que el movimiento obrero deberá desenvolver contra todos esos políticos patronales. | 
