“Se observa un claro sálvese quien pueda, porque a muchos lo único que les importa es conseguir algún cargo”, se escuchó hace pocas horas de boca de un tradicional dirigente radical, mientras otro correligionario suyo decía en otra provincia que “no tenemos un partido en liquidación, no estamos en venta al mejor postor”.
Ese es el tenor de los debates que atraviesan en estas horas a la histórica Unión Cívica Radical. Es que sin chances reales de pelear por la presidencia, para muchos radicales se trata entonces de poner en oferta su vieja estructura partidaria para presidenciables como Massa o Macri que carecen de ella, obteniendo a cambio apoyos provinciales que les permitan alzarse del “poder real” en sus provincias. Bien lejos de los discursos republicanos sobre valores, principios e institucionalidad, y muy cerca del mayor pragmatismo que permita obtener cargos e importantes cuotas de poder.
Bajo esta lógica se gestó la foto de la polémica en Jujuy entre Sergio Massa y el senador Gerardo Morales, que hizo crispar los ánimos en la UCR. Quien más se molestó fue Julio Cobos, que sintió que esa estrategia para ganar los territorios lo tenía a él como principal perjudicado en su candidatura presidencial, y favorecía en cambio a sus competidores del PRO y el Frente Renovador. Sin embargo, no faltó quien le señalara a Cobos la contradicción de que el ex “radical K” pidiera respeto a la institucionalidad partidaria.
Tampoco cayeron bien estas movidas en los socios del FA-UNEN, que ven bajar el precio de las acciones de su ya alicaída cooperativa electoral. Una de las aliadas del espacio, la diputada Victoria Donda, advirtió que “nosotros no vamos a ningún lado, ni con Macri ni con Massa”, mientras que el economista Alfonso Prat Gay se quejó de que terminan “haciéndole la campaña a Massa o a Macri”.
Así las cosas, y antes del estallido de un nuevo escándalo con la foto que se avecina entre Massa y el Diputado radical José Cano que aspira a la gobernación de Tucumán, tuvo lugar la cumbre entre Ernesto Sanz y Julio Cobos, para calmar los ánimos antes de la próxima Convención Nacional de la UCR. Estuvieron presentes también, entre otros, Ricardo Alfonsín y Ricardo Gil Lavedra.
Según trascendidos, en la reunión que se hizo en el Comité Nacional de Alsina al 1700, habrían acordado que en las provincias donde las elecciones sean antes de la votación presidencial de octubre, los candidatos radicales podrán ser apoyados por otras fuerzas, pero no al revés, mientras que en las provincias donde las elecciones sean simultáneas habrían decidido que los candidatos radicales a las gobernaciones deberán dar apoyo explícito a los presidenciables del FA-UNEN.
Más allá de las palabras, el acuerdo tendrá que ser puesto a prueba. De llevarse a cabo, pondría en cuestión la foto de la polémica entre Massa y Morales en Jujuy, donde las elecciones son simultáneas a las presidenciales. Sugestivamente, el senador jujeño estuvo ausente en la reunión del martes. La novela tendrá nuevos capítulos, y uno de ellos será en la Convención Nacional de la UCR, donde pesarán mucho los cálculos en búsqueda del poder real. |