Según las estadísticas publicadas este año por el Ministerio de salud de la Nación, el cáncer colorrectal suma, todos los años, once mil nuevos casos y provoca más de siete mil muertes. En promedio, todos los días, veinte argentinos mueren debido al cáncer colorrectal. Los especialistas aconsejan que toda persona mayor de cincuenta años o con algún factor de riesgo para la enfermedad, debe realizarse una colonoscopía para descartar la enfermedad. El diagnóstico temprano es fundamental: si se detecta a tiempo, más del 90% de los casos sobrevivirá.
Se denomina cáncer colorrectal a aquellos tumores que tienen origen en las últimas porciones del tubo digestivo: el colon y el recto. Se produce por una compleja interacción entre factores ambientales y hereditarios, entre los que pesan la dieta, los hábitos (tabaco, alcohol) y los antecedentes familiares.
En nuestro país, esta enfermedad ocupa el segundo lugar en mortalidad por cáncer, superado sólo por el cáncer de pulmón. Afecta de forma similar a ambos sexos, con un número ligeramente mayor de casos en hombres. El 90% de los diagnósticos se da en mayores de cincuenta años.
Mortalidad por cáncer colorrectal en la Argentina y división por sexo (año 2014)
Casi todos los casos comienzan como pólipos, lesiones pequeñas que crecen lentamente, incluso tardando más de 10 años en desarrollarse. Los síntomas generalmente aparecen cuando la enfermedad ya está avanzada. Es una enfermedad mortal, pero si se diagnostica a tiempo, antes de que llegue a un estado avanzado, la supervivencia alcanza el 90%.
El diagnóstico se realiza a través de la colonoscopía, un estudio que posibilita, a través de una cámara, un análisis minucioso del intestino del paciente. Permite detectar incluso lesiones pequeñas, que no hayan dado síntomas, y tomar muestras de esas lesiones para analizarlas en busca de células malignas. También pueden realizarse estudios de “sangre oculta en materia fecal”, que permiten detectar la presencia de lesiones sangrantes.
Según las recomendaciones del Ministerio de salud de la Nación, toda persona mayor de cincuenta años, o con factores de riesgo, debería ser estudiada para detectar precozmente un cáncer colorrectal.
Síntomas más frecuentes Sangre en la materia fecal
Diarrea frecuente o persistente
Constipación frecuente o persistente
Dolores abdominales o rectales frecuentes
Anemia
Pérdida de peso
Factores de riesgo Presencia de síntomas
Edad mayor a 50 años
Colitis ulcerosa o Enfermedad de Crohn
Personas con antecedentes de pólipos
Familiares directos (padres hermanos o hijos) de personas con cáncer colorrectal o pólipos colorrectales |