Foto: Alf Ponce/MdZ
El juez federal de La Rioja, Daniel Herrera Piedrabuena, citó a César Santos Gerardo del Corazón de Jesús Milani a prestar declaración indagatoria el próximo 28 de junio por los secuestros de Ramón Alfredo Olivera, de su padre Pedro y de Verónica Matta.
El exjefe del Ejército durante los últimos años de gobierno de Cristina Fernández fue citado junto al exjuez federal Roberto Catalán (declarará el 29), al exoficial del Ejército Francisco Santacroce (el 30) y a dos policías riojanos.
Denuncias que el kirchnerismo ignoró
A finales de 2013 Cristina Fernández de Kirchner envió al Senado el pliego para designar a Milani como jefe del Ejército. Las denuncias por delitos de lesa humanidad contra Milani databan de 1984 y fueron ratificadas. Aun así el kirchnerismo decidió ignorarlas.
Tal es el caso de Ramón Olivera, quien denunció a Milani ante la Comisión de Derechos Humanos de La Rioja, la cual publicó un informe que fue conocido como el “Nunca Más” riojano.
En marzo de 1977 Ramón Olivera fue secuestrado de su domicilio y estuvo diez días incomunicado en una comisaría. “Estuve diez días desaparecido. Después me llevan a declarar al juzgado federal, ese traslado lo hace Milani. Él ingresa conmigo a la sala del juzgado, ahí lo reconozco, era el mismo que allanó mi casa.
Esa declaración me la toma el secretario del juez federal Roberto Catalán, Armati, y ahí estuvo Milani, diciendo que yo era un guerrillero. Cuando quiero declarar que me torturaron durante esos diez días, Armati me dice que sería peor para mí. Hasta los secretarios de los juzgados estaban comprometidos con la dictadura. Ahí le pregunta a Milani su nombre, y yo lo memorizo para denunciarlo”, relató en una entrevista para este diario.
Ramón Olivera estuvo preso durante cuatro años y medio. Su padre, Pedro, fue secuestrado dos días antes que él y también reconoce a Milani de ese operativo. “Las torturas le produjeron una hemiplejia. Yo vinculo a Milani con todo lo que vivió mi padre, porque él se lo llevó de mi casa. Por eso la denuncia que está en el juzgado es por privación ilegitima de la libertad seguida de torturas contra Milani”, señaló en la misma entrevista.
“Milani estaba dentro del centro clandestino de detención”
En julio de 2014 Verónica Matta declaró ante la justicia federal por su secuestro el 16 de julio de 1976 y el rol que ocupó Milani. Matta tenía 17 años y era delegada en el Colegio Nacional Joaquín V. González. Allí conoció a Alberto Ledo, conscripto riojano desaparecido en Tucumán, caso en el que también está implicado Milani. Sugestivamente, Matta fue secuestrado un mes después de la desaparición de Ledo.
Sobre el operativo donde fue secuestrada, Matta recordó en una entrevista al diario Perfil que “había una figura que contrastaba con el resto de los presentes. Era un jovencito vestido de militar, muy puesto, carilindo, y que llevaba la voz cantante. Le decía a mi viejo: ‘No se preocupe doctor’. Mi papá preguntaba: ‘¿Pero a dónde la llevan?’. ‘No le podemos decir, doctor’, le decía este militar jovencito. Mi viejo era abogado e hizo llamar a un vecino para que testifique que me estaban llevando, eran don Feiling, que murió. También recuerdo que le pidió al militar joven que firmara un papel y tengo el recuerdo de que lo firmó. Ese hombre para mí era Milani".
Matta fue trasladada al Instituto de Rehabilitación Social, un centro clandestino de detención. Atada y vendada para los interrogatorios pudo reconocer, en una oportunidad que se le corrió la venda, a ese joven militar que identificó con Milani cuando lo vio por televisión hace unos años. “Milani estaba dentro del centro clandestino de detención, en medio de los interrogatorios”, asegura y agrega que allí la interrogaron sobre Ledo.
Milani sigue en la impunidad
El 17 de junio se cumplieron 40 años de la desaparición de Alberto Ledo. Como conscripto en el batallón de ingenieros en construcción 141, Ledo fue trasladado a Monteros (Tucumán) en mayo de 1976. Previamente había sido señalado como dirigente estudiantil por la inteligencia del Ejército.
Su desaparición fue presentada como una deserción y Milani está acusado de haber elaborado un acta de deserción falsa. Sus familiares y organizaciones de derechos humanos insisten para que también sea llamado a indagatoria por esta causa.
Otra denuncia contra Milani, cuando aún era jefe del Ejército del kirchnerismo, fue iniciada por Myriam Bregman y Matías Aufieri, abogados del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH), que se presentaron como querellantes junto a Oscar Schaller.
En los últimos días el nombre de Milani volvió a los diarios cuando Guillermo Moreno deslizó que lo quería como candidato al Congreso en 2017. El único lugar donde Milani tiene que estar es en la cárcel. | 
