Miguel Bein vuelve a demostrar en la mañana de este sábado que no había diferencias sustanciales entre el plan económico de Cambiemos y el del Frente para la Victoria, que llevaba como candidato a presidente a Daniel Scioli en las pasadas elecciones nacionales.
En una entrevista que le realiza el periodista Diego Sehinkman para el diario La Nación, el ex asesor económico de Scioli dispara una serie de definiciones que justifican el ajuste en curso.
Entre las respuesta de Bein puede leerse “lo que le digo es que en ninguno de los dos casos, ni con Macri ni con Scioli, eso se iba a poder sostener (…) En ninguna de las dos agendas políticas ibas a poder sostenerlo. Eso no dependía de una persona. Esto es una estructura económica que, de alguna manera, te condiciona”.
Consultado sobre la figura de Macri, Bein responde que “no es un neoliberal”, sino que es “un desarrollista y es un constructor. Viene de una familia de trabajo, no viene de una familia financiera (…) el Presidente de la Nación no tiene una matriz de pensamiento neoliberal, pero sí desarrollista. Comparte la idea de que el motor de la actividad económica tiene que ser la inversión y no el consumo”.
Definir a la familia de Macri como “de trabajo” suena, como mínimo, chocante, más cuando es públicamente conocido que se trata de un grupo económico que creció al amparo de los negocios de la obra pública y tuvo su ascenso meteórico durante el período de la última dictadura militar.
Consultado por el panorama político, el ex asesor de Scioli deja escapar una serie de definiciones reaccionarias: “vos tenés un ciclo político donde hay una elección año por medio -cosa que fue un error, sería mucho mejor tener un ciclo político de tres años promedio-. Con el padrón electoral que vos tenés en la Argentina, donde casi la mitad de la población no terminó la escuela secundaria, la comprensión de los fenómenos económicos de largo plazo no es generalizada. La mayor parte de la gente vota a los gobiernos si le alcanza la plata en el bolsillo, y si no, no los vota”.
El argumento remite, casi de manera lineal, al pedido de voto calificado. Bein atrasa un siglo en términos políticos.
Al mismo tiempo, el economista utiliza la entrevista para pujar por una nueva devaluación. Ante la consulta por el precio del dólar, afirmó que “yo pienso que el dólar de 16 sería todavía mejor para la industria, para la exportación y las economías regionales”.
El pedido acompaña los intereses personales del ex asesor de Scioli, aunque se excusa de opinar sobre la situación del campo porque “soy productor agrícola, por lo tanto es un tema donde sectorialmente estoy involucrado” el pedido de devaluación lo mantiene.
Así, como ya lo hizo en anteriores ocasiones y lo hicieron muchos otros ex funcionarios kirchneristas, asesores económicos o líderes de ese espacio político y del peronismo, Bein viene a ratificar que la izquierda tuvo razón cuando hizo un llamado a votar en blanco en octubre pasado. |