El Gobierno Nacional busca aportar $ 2.000 millones al Fideicomiso Administrativo y Financiero del Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar (Pro.Cre.Ar) a través de la colocación de Letras del Tesoro Nacional.
Según la Resolución Conjunta 114/2016 y 31/2016, de las Secretarías de Hacienda y Finanzas, el instrumento financiero intransferible vence en dos años y devenga un interés anual de 17 % (TNA). Además, abre la posibilidad de solicitar su cancelación anticipada siendo la tasa de interés, para estos casos, del 15 % (TNA).
La disposición llega una semana después de los anuncios en materia de créditos hipotecarios, resumidos en el lanzamiento de una línea de créditos para el Banco Nación y el relanzamiento del Pro.Cre.Ar. Esta medida está orientada, principalmente, a compensar en parte el impacto por la recesión en la economía que acumula en mayo una caída de la producción industrial del 4,3 %.
Según el Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censo) la fabricación de insumos para la construcción en mayo presentó una baja del 5,3 %, caída explicada mayormente por la baja del 16,4 % en la elaboración de cemento para el mismo mes.
A través del Pro.Cre.Ar se prevé asignar $ 5.000 millones destinados a familias con ingresos de entre $ 15.000 y $ 30.000 mensuales. La inscripción se abrirá el próximo 10 de julio y su método de asignación ya no será por sorteo, sino que se a través de un sistema de puntajes.
Según autoridades del Banco Nación un primer objetivo es el otorgamiento de 25 mil créditos a través del Pro.Cre.ar. Al comparar esta cifra con el déficit habitacional, estimado en 3,5 millones de viviendas por el subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, Ivan Kerr, la situación está muy lejos de encontrar una solución definitiva a los problemas habitacionales que sufren millones de familias. |