Foto: Martino y la Selección que no fue. (Taringa)
La Asociación del Fútbol Argentino pasa un momento de crisis institucional, económica y política. Actualmente está intervenida de hecho: hoy mismo podría acordarse la conformación del famoso “Comité Normalizador” que establecerán los veedores de FIFA con la aprobación de la Justicia argentina, Servini de Cubría en este caso.
Ese organismo dirigirá durante un año los destinos el fútbol nacional. En ese marco se aprobará una Superliga para el fútbol de Primera que todavía no está del todo configurada (aunque ya hay acuerdo por implementarla con Marcelo Tinelli como presidente; se podría concretar este 11 de julio) y seguirá la relación de financiamiento estatal del fútbol vía el programa Fútbol Para Todos.
Toda la dirigencia está a la espera de que se establezca ese “Comité Normalizador”. Mientras tanto, la situación es de vaciamiento absoluto: es como cuando una administración de edificio se va de un consorcio, “de pronto” no hay plata ni para el café. Se llegó al colmo de desistir –por falta de fondos- de enviar un equipo femenino Sub-20 de FUTSAL (fútbol de salón) al Torneo Sudamericano en Paraguay, competencia que no debería significar demasiado despliegue de gastos.
Pero algo está claro: este clima de “desgobierno” que se expresó en las dificultades de Martino para armar un plantel que compitiera en los Juegos Olímpicos de Río (lo que determinó su decisión de renunciar), en lo inmediato favorece a la intervención FIFA-judicial y a la implementación de la Superliga. Tal vez se dio así de casualidad y los dirigentes actuaron sin medir consecuencias en función de sus propios intereses (y de sus clubes) al no ceder jugadores; tal vez algunos calcularon que “a río revuelto, ganancia de pescador”. Ante este panorama, la intervención “tiene lógica”.
¿Cómo se formará el Comité Normalizador de AFA?
Según Primo Corvaro, el representante de FIFA que está a cargo del armado de ese organismo, estará integrado por entre cinco y siete miembros, y uno de ellos deberá ser una mujer de acuerdo a los estatutos de FIFA.
“Para conformar este Comité entrevistamos a siete personas y mañana [por hoy, N de R] haremos otro tanto con la misma cantidad de personas. El jueves iré a Zurich y entregaré el informe a la FIFA, que será la encargada de elegir a los integrantes del organismo entre los que nosotros seleccionamos", explicó Corvaro a la agencia Télam.
La “elección” de un nuevo DT para la Selección
El interventor Corvaro fue claro: el sucesor de Martino como DT será elegido por el Comité Normalizador.
Ayer se especulaba con la posibilidad de que el equipo que se logre reunir (nadie sabe con qué jugadores) para competir en las Olimpiadas de Río de Janeiro fuera conducido por el “Vasco” Olarticoechea (que estaba a cargo de los seleccionados juveniles) en un breve interinato. La afirmación de Corvaro parece disipar esa idea.
La renuncia de Martino fue motivo de discusión en cada rincón del país: ¿Quién tendría que ser el próximo DT de Argentina? Se barajaron una decena de nombres. Desde nuestra cuenta oficial de Twitter consultamos al público lector de La Izquierda Diario mediante una encuesta para conocer sus preferencias. En principio, Simeone y Bielsa eran favoritos.
Pero era simplemente un juego: recién cuando se resuelva quiénes gobernarán la AFA (“Comisión normalizadora”) se conocerá con qué fondos cuenta la institución para contratar un nuevo DT que ocupe el cargo de manera definitiva. El elegido será del gusto de los miembros de ese nuevo gobierno: es muy probable que sean enviados de la FIFA de Infantino, de Servini de Cubría y representantes de las facciones de la vieja dirigencia de AFA (desde los pro-Superliga de Angelici hasta los “clásicos” como Moyano y “Chiqui” Tapia).
El colmo de lo antidemocrático: el cargo del que opina todo el país –el de DT de la Selección Nacional- será decidido por un comité designado por una intervención extranjera (FIFA) y con el aval de una jueza a la que tampoco votó nadie. Así de mal está el fútbol. Si se nota poco es gracias a sus protagonistas: jugadores, socios de los clubes, simpatizantes e hinchas. O sea, quienes quedamos relegados a mirarlo por TV. |