En el día de ayer se desarrolló una conferencia de prensa que fue cubierta por un importante número de medios de comunicación. De la misma participaron, en apoyo a los jóvenes y su familia, referentes de organizaciones políticas y de derechos humanos.
Virginia, una de las jóvenes detenidas, declaró: “Se llevaron libros políticos y no se me informó las razones. También me quitaron las computadoras y me dejaron incomunicada durante horas. Yo no pertenezco a ningún grupo político. Además, sufrí amenazas de efectivos oficiales. Un policía me llamaba anarquista con mucha saña respecto al socialismo”. Y agregó: “Una persona de mi círculo familiar íntimo recibió dos amenazas luego de nuestra liberación diciéndonos que cerráramos la boca y hablemos menos”.
Entraron pateando la puerta, en horas de la tarde. Eran cerca de quince efectivos de la policía, que apuntaron a Virginia, de 22 años, y a Matías de 23. El relato del allanamiento es verdaderamente alarmante.
Desordenaron todo, leyeron cada papel que encontraron. Algunos tuvieron un trato cordial, y otros los insultaban y patoteaban. Les dijeron “anarquistas” y “socialistas”, como si eso fuese un insulto. Y como si esto sólo no fuese terriblemente, como prueba del supuesto delito de pintar una pared se llevaron además de unos aerosoles de pintura, libros y fanzines de ideología anarquista y socialista. Así, Virginia expresaba cómo esa situación le recordaba los relatos de los sobrevivientes de la última dictadura militar.
Queda expuesto el nivel de persecución ideológica del gobierno del derechista intendente Carlos Arroyo. Un despliegue de inteligencia y personal policial para detener e intimidar a un par de jóvenes que supuestamente cometieron el “grave delito” de hacer una pintada. En definitiva, un ataque a las organizaciones y sus militantes.
Todos sabemos que el intendente Arroyo fue funcionario durante la última dictadura militar y tiene estrecha vinculación política con bandas neonazis que atacaron a jóvenes LGTBI, del Colectivo Antifascista y fomentaron la violencia hacia las mujeres que participaron del último Encuentro Nacional de Mujeres. |