El viernes 15 comenzó por la tarde el primer taller de colaboradores de La Izquierda Diario en CABA, en el Instituto de Pensamiento Socialista Casa Karl Marx, organizado por los estudiantes de la Juventud del PTS de Comunicación de la UBA. El encuentro es el inicio de una serie que se estarán realizando en las próximas semanas y que serán impulsados entre docentes y trabajadores de la industria, facultades, terciarios y secundarios de la Ciudad.
La primera parte del encuentro trazó un ida y vuelta entre los miembros de la redacción central de La Izquierda Diario y los asistentes, donde se notó un gran entusiasmo por querer colaborar de manera activa y seguir extendiendo las ideas de la izquierda, para impulsar la resistencia al ajuste del gobierno nacional y los gobernadores y fortalecer el Frente de Izquierda.
Enfoques y construcciones: el diario como organizador colectivo
La segunda parte del encuentro abordó cómo los grandes medios de comunicación son enormes maquinarias que construyen grandes sentidos comunes y generan ideología los 365 días del año, priorizando las noticias de acuerdo a sus intereses económicos y políticos. Sin embargo, La Izquierda Diario tiene, a diferencia de ellos, una potencialidad de miles de colaboradores que trabajan en las fábricas, en salud, estudian en colegios o facultades y que rápidamente pueden dar a conocer las realidades que los otros medios callan, si se apropian del diario y lo toman en sus manos. Los ejemplos de los trabajadores de call center de Rosarioque luchan contra los despidos y la precarización laboral, y el conflicto contra el despido xenófobo a un trabajador de supermercado en La Plata, fueron dos de los casos que se debatieron en el encuentro, ya que ambos muestran cómo a partir de reflejar sus denuncias en el diario, éste se puede transformar en una herramienta de organización para llegar a otros sectores y alentar a que cada vez sean más los que se apropien del diario y difundan sus experiencias.
Por otro lado, la parte práctica del encuentro donde se trabajó en común entre los presentes, disparó una de las reflexiones destacadas alrededor de lo que implica la construcción de LID como un diario comunista: un proyecto colectivo en construcción permanente, donde la producción y la edición conjunta así como las críticas del resto de los integrantes fortalecen al medio en su totalidad.
Las voces
El buen clima y el entusiasmo quedaron reflejados en el encuentro y, una vez finalizado, en las opiniones de los que se quedaron al bar para pasar un buen rato mientras comieron y tomaron algo. Daiana, estudiante de Comunicación de la UBA, dijo: “Siempre voté a la izquierda, nunca tuve la oportunidad de militar y creo que escribir en el diario es una manera de colaborar. El clima fue distendido, buena onda, fue un diálogo más que una conferencia y eso estuvo bueno porque muestra el espíritu participativo de La Izquierda Diario”. Felipe relató: “LID es un diario con una visión diferente. Está hecho desde el trabajador, el estudiante o desde aquel que vive en carne propia los conflictos, se torna cercano y hasta en cierto punto personal. Da ganas de participar en él e informar a los otros sobre lo que pasa alrededor”. Paula, también de Comunicación de la UBA, dijo: “Me resultó muy interesante y productivo hacer las correcciones colectivas y los debates que surgieron en torno a cómo y qué incluir al momento de escribir para el diario”. Matías, periodista deportivo de ISEC, contó: “LID es muy enriquecedor para quien busca otra voz para su reflexión de lo que sucede en nuestro país y en el mundo. Quiero participar en el diario, transmitir algo desde la palabra, con una mirada desde la izquierda”. Augusto, estudiante de periodismo de TEA, destacó: “El diario se ofrece como un modo de reflexión y crítica, algo que los medios más hegemónicos quisieron perder hace mucho tiempo”.
También participaron trabajadores de distintos lugares como de la Dirección General de Música de la Ciudad de Buenos Aires, quienes vienen organizándose contra el vaciamiento del gobierno de Larreta. Una de ellas es fotógrafa y contó cómo el diario se convirtió en una referencia para ella y sus compañeros de trabajo a partir de publicar la amenaza que sufrieron por parte de la policía y que generó una enorme repercusión y mostró la potencialidad de apropiarse de una herramienta como La Izquierda Diario. Otro de los trabajadores destacó: “El taller me pareció muy importante para profundizar en la propuesta de que seamos los trabajadores los que acerquemos información que no circulan por la vía de los periodistas y agencias de noticias tradicionales. Los ejercicios que hicimos nos acercaron al trabajo real de frases cortas que siguen teniendo una postura ideológica”.
Los próximos talleres se realizarán sobre periodismo con perspectiva de género y producción audiovisual.
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