Mientras desde el gobierno nacional se pide usar la menor energía posible, y el tarifazo se hace sentir en todas las provincia, hablamos hoy de la lucha contra la explotación megaminera, se fortalecen y aumentan los escenarios de lucha.
El viernes 22 de julio los vecinos concentraron alrededor de la 18hs en la peatonal Luis Gazín de la cuidad para pronunciarse en contra de la megaminería, el saqueo y la contaminación. La jornada continúo con una convocatoria a una charla abierta e informativa sobre el uso de las cuencas que haría la megaminera, en el local de la CTA de la cuidad, a cargo de la Cátedra Abierta de Estudios Urbanos y territoriales de la UNPSJB. En dicha reunión se proyectaron mapas, gráficos y datos estadísticos, de las cuencas que abastecen al territorio chubutense actualmente dividido en comarcas y la denominada “zona de sacrificio”. También contó con la presencia de vecinos de otras zonas, como Rawson y Dolavon; quienes aportaron sus experiencias y comunicaron las denuncias y malestares de los vecinos a causa del proyecto megaminero. La jornada se centró en reflexiones y análisis en base al siguiente comunicado: “Si analizamos las consecuencia de la megamineria a través de las cuencas existenciales en la región, la población bajo riesgo incluiría a los poblados existentes por fuera de la comarca de la meseta central. Según el censo de 2010, la población de las cuencas implicadas serían más de 240.000 personas. No sería descabellado proyectar que a 2016 la población la población bajo riesgo de contaminación superase las 300.000. Cabe preguntarse si, en una región esteparia el gobierno arriesgara la contaminación irreversible de un bien que debería ser comunitario, y no privatizado en favor de las mineras. Durante la gestión de Buzzi como gobernador, se zonificó el territorio en cuatro comarcas: los Andes, río Senguer-Golfo San Jorge, Virch-Valdes y Meseta central. Con baja densidad población y lejos de los centros urbanos donde se originan las principales resistencias, se pretende sacrificar la comarca de la meseta central para llevarle el “progreso”, mientras el resto de la provincia queda a salvo de las externalidades sociales y ambientales. Esta estrategia concebida por políticos y economistas, lejos está de entender el complejo funcionamiento del ambiente y las verdaderas causas de la pobreza de la población, como se ha visto con experiencias en otras regiones (San Juan, Catamarca, por ejemplo), la megaminería solo profundizaría la problemática socio-ambiental. Podría decirse entonces, que la región bajo riesgo de contaminación es muy superior a lo que propone el gobierno y declaran las mineras.
Incluso se debe incluir la contaminación del océano atlántico, ya que la cuenca del rio Chubut es exorreica (sus aguas drenan en el mar). El efecto del viento no es un dato menor. Chubut posee los de mayor velocidad promedio en todo el país, y durante gran parte del año la dirección de los mismos es en sentido oeste-este. Por lo tanto la contaminación podría ser también por transporte de las partículas vía aérea, ya sea por rodadura, saltación o suspensión. Poner el agua y las cuencas al servicio de la población podría ser el punto del inicio de un modelo de economías regionales sustentables, que ayudasen a motorizar el potencial eólico, turístico, agrícola y ganadero de la región” –
Mega-negocio multinacional y capitalista: La meganimera arrastra consigo un negocio para muchos. Las empresas multinacionales extractivitas realizan un estudio y análisis previo de nuestra zona para vender a manos extranjeras o apropiarse de la tierra y así lograr el saqueo de materiales preciosos, como el oro y la plata, y además uranio, cobre y plomo. Además con la firma del ministro de Energía Juan José Aranguren en Beijing en un memorando de entendimiento con el director de la Administración Nacional de Energía China para la construcción de dos centrales nucleares por unos 12000 millones de dólares se reabre la lucha contra el plan nuclear. Son varios los medios de comunicación financiados por las empresas megamineras, por lo que la publicidad e información prominera es imperante en diarios y radios. Tienen su interés en nuestro territorio, y no solo eso, también la prensa y los medios son pagados por las mineras para engañar a la gente con falsa publicidad e información.
Mega-contaminación, enfermedad y muerte: La contaminación de la megaminería es tal, que trae enfermedades respiratorias, en la piel, en la sangre, cáncer y hasta muertes.
Algunos números para dimensionar el saqueo
Del cordón cordillerano de América se extrae gran porcentaje del oro usado a nivel mundial, y los países latinoamericanos solo usamos el 1% de esa extracción.
Actualmente se explotan 2000 kg de montaña para obtener 1 gr de oro, es lo mismo que desarmar 2 autos para utilizar una sola tuerca. Megaminería metalífera a cielo abierto, es la forma de extracción porque el oro ya no se encuentra puro sino asociado a otros minerales en la roca que conforman las montañas
Una empresa megaminera ocupa 10 millones de metros cuadrados que es un espacio equivalente al necesario para construir 2500 canchas de fútbol o 35 mil viviendas. Por día, la megamineras explotan 3 millones de kilogramos de montaña para obtener 10 gr de oro, el equivalente a 600 camiones. Lo hace realizando 9 explosiones diarias, es decir por año 3285 explosiones anuales, usan 70 mil kg de explosivos hasta obtener los open pit, agujeros o tajos abiertos, el polvillo levantado por las reiteradas explosiones se suspende en el aire gases nitrogenados que al difundir entre las nubes provocan la lluvia ácida, generando graves problemas respiratorios y dérmicos entre la población; estas perforaciones tienen un diámetro de 2 km y 800 metros de profundidad, es decir, equivalen a un millón y medio de piscinas olímpicas. ¿Podés dimensionar los tamaños? ¿Podés dimensionar los daños?
Para moler la roca obtenida, son necesarios grandes camiones transportadores y cintas de moliendas. Estos camiones consumen la misma cantidad de combustible que un auto para dar 15 vueltas alrededor de la tierra. Y las máquinas, la luz que usarían 2 millones de personas en sus casas. Por día se utilizan en el proceso de lexiviación 100 millones de litros de agua, y por necesitar que sean de gran pureza para hacer más eficiente el proceso, lo hacen extrayendo agua subterránea con grandes bombas. El proceso de lexiviación consiste en usar cianuro que funciona como un imán para atrapar las partículas de oro, pero no es el único proceso ya que también existe el de flotación, por el cual mediante reacciones químicas se producen burbujas que separan a los minerales de la roca. El residuo de este proceso va a parar a los diques de cola, que por infiltración pasan su contenido a las aguas subterráneas actuando como una bomba de tiempo para los habitantes de sus cercanías, siendo hasta 3 veces más grande que dichas ciudades. Este barro sale en camiones hacia el puerto y de allí en barcos, para que las empresas encargadas del último paso en la producción minera conformen los lingotes, de los cuales, América Latina, usará solo el 1%, quedando saqueada, contaminada y enferma.
El doble discurso local y la política extractivista nacional
Cada vez que el Presidente Macri vocifera en sus discursos la explotación minera, suben mundialmente las acciones de las multinacionales mineras. Pero esto no es actual, desde la época menemista en los 90. El Proyecto Navidad en la meseta central fue pasando por diversas manos y las multinacionales cambiando sus nombres para ser mejor recibidas por la población. Al consultarle a los distintos actores del gobierno provincial sobre la explotación megaminera incurren con frases abarcativas como la necesidad de profundizar el debate, pero sin dar lugar a este, o recurriendo a la polifonía planteando que es un tema de múltiples aristas, incluso el actual gobernador se refiere en contra y sus acciones y decisiones políticas son promineras.
En el interior de la provincia la ausencia del estado, deja al abandono de los buitres extractivistas a la población, pero además sufren doblemente la violencia del estado al amenazar a los vecinos. A aquel vecino que denuncie lo silencian como es evidente en la desaparición de Reimundo Pino. Sabemos, que hay vecinos en otras zonas, como en Comodoro Rivadavia, Caleta Olivia y el resto de Santa Cruz que pasan días y semanas sin tener agua, porque el agua se reserva para las mineras. Lo cierto es,que la megaminería contamina, y cuidar nuestras tierras y ríos es parte de un derecho ambiental, y es un delito de lesa humanidad por las enfermedades y muertes que contrae. Hay marchas, manifestaciones y denuncias en legislatura y defensoría del pueblo; pero el estado silencia y oculta. Intentamos tener información sobre nuestros recursos, y nos las niegan. Continuaremos con nuestra lucha; porque nuestra provincia, no es zona de sacrifico. Porque defendemos la vida, la tierra y el agua. ¡Megamineria en mi tierra, ni un día más! El discurso del trabajo y el progreso es una mentira capitalista. ¡NO es NO! |