Mediante dos preguntas, a través de una encuesta telefónica, se busca medir la imagen de la empresaria y el rol que debería cumplir.
En primer lugar , se cuestiona a qué debería dedicarse una Primera dama en un Gobierno: desnutrición infantil, violencia de género, obesidad infantil, moda y diseño, huertas y jardinería, y política social, se presentan como posibles respuestas.
Luego se presentan dos opciones para que los entrevistados decidan si están de acuerdo con que la primera dama “tiene que participar de política” o “quedarse en su casa cuidando a sus hijos”.
Tras lanzar el zondeo desde la Casa Rosada, aseguraron que no tiene relación con fines electorales, pero por alguna razón eligieron medir opinión publica de Juliana Awada pasando el segundo semestre, mientras evalúan crearle una cuenta en redes sociales como Facebook.
Luego se presentan dos opciones para que los entrevistados decidan si están de acuerdo con que la primera dama “tiene que participar de política” o “quedarse en su casa cuidando a sus hijos”
En la primera etapa del gobierno de Macri y durante la campaña electoral , Awada se dedicó a lucir lujosos modelos de miles de dólares y a sonreir. En los medios se presentaba a la esposa de Macri como “educada para sonreir”. Pero por otro lado, los antecedentes mediáticos de la primera dama se relacionan a su empresa textil y denuncias vinculadas al trabajo esclavo.
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Esta encuesta, analiza también las imágenes de la ministra Carolina Stanley ; la diputada Elisa Carrió; la vicepresidenta Gabriela Michetti; la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner; y el propio presidente Mauricio Macri.
La incorporación Juliana Awada busca elevar su participación pública, queda por ver el rol que pueda jugar la primera dama como actor político por fuera de la vida empresarial.
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