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La Izquierda Diario
7 de agosto de 2016 Twitter Faceboock

DÍA DEL VETERINARIO
“Antes que médicos veterinarios, somos agentes de salud pública”
Clara Gentile | Estudiante en la Tecnicatura en Conservación de la naturaleza y ANP (UNdAv).

El 6 de agosto se celebra en Argentina el día del veterinario. A más de 130 años, reflexionamos acerca de cuál es el rol de un veterinario en nuestra sociedad actual y conversamos con una estudiante avanzada de Ciencias Veterinarias de la UBA y trabajadora del Hospital Escuela de la Universidad.

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Hacia 1883 el ejercicio de la profesión veterinaria en Argentina estaba compuesto por no más de treinta graduados, formados en el extranjero. Es entonces cuando, un 6 de agosto, se inician las clases en el Instituto Superior de Agronomía y Veterinaria de Santa Catalina, partido de Lavallol, con tan solo tres inscriptos. En esa época, se consideraba un mal gasto público el crear una escuela para veterinarios, pero ya para 1890 se trasladó la Facultad al partido de La Plata, dando lugar a la prestigiosa facultad de Agronomía y Veterinaria de la Universidad de dicha ciudad.

Hoy la carrera se dicta en numerosas universidades del país, tanto públicas como privadas, siendo más de dieciocho mil los graduados en ejercicio, y donde el mayor porcentaje de los profesionales se concentran en la provincia de Buenos Aires y la Capital, Córdoba y Santa Fe.

En conmemoración de la inauguración del Instituto de Santa Catalina es que hoy se celebra en el país el día del Veterinario, así como también el día del Ingeniero Agrónomo. A más de 130 años de la primer escuela en el país, reflexionamos acerca de cuál es el rol de un veterinario en nuestra sociedad actual. La realidad muestra que el lugar que ocupa la profesión es crucial en el desarrollo de la economía ganadera, siendo los encargados del engorde, la reproducción y el cuidado del ganado; la investigación en la industria farmacéutica y cosmética y también el cuidado de mascotas, entre otras actividades.

Resulta llamativo, sin embargo, encontrarnos con una profesión muy subvaluada a nivel sociedad, con casi nula sindicalización y una regulación de la actividad inexistente que se traduce en niveles de precarización laboral alarmantes.
Desde La Izquierda Diario abrimos esta reflexión y conversamos con Sabrina Castigniani, estudiante avanzada de Ciencias Veterinarias de la UBA y trabajadora del Hospital Escuela de la Universidad.

¿Qué lugar ocupa la veterinaria hoy? ¿Cómo opinas que se la concibe a nivel sociedad?

Creo que en nuestro país el rol del veterinario no es bueno. Siempre se lo asocia con el médico del gatito y del perrito y no es asi. Hay muchos veterinarios que no se quieren dedicar a la clínica o que no le gustan los perros y los gatos, que prefieren estar cultivando bacterias, haciendo exámenes clinicos, o experimentando con animales o trabajando en producción. Es una carrera muy extensa y muy exigente, y no estamos al mismo nivel que la medicina humana. Estaría bueno estar al mismo nivel (o más tambien) ya que el veterinario, a pesar de especializarse, mantiene un nivel de conocimientos muy integral y también es científico, descubre medicinas, vacunas y drogas, que después se implementan a los humanos y la verdad estamos muy menospreciados.

¿Cómo son las condiciones laborales de un veterinario?

Las condiciones laborales de un veterinario en general, por mi propia experiencia, no son buenas. No hay un sindicato, no hay obra social, nada que controle el rol del veterinario. Por ejemplo todo veterinario o ayudante de veterinario debería estar vacunado contra la rabia y si uno hace un sondeo de quienes están vacunados son muy pocos. No está bien definido cuánto hay que pagarle a un veterinario o a un ayudante, ni está determinado cuánto sale una consulta. Eso queda a criterio de cada veterinario, cuánto va a pagar o cuánto va a cobrar. No ganás tampoco lo mismo en Hurligham que en Belgrano, porque obviamente no se cobra lo mismo. Por eso estaría bueno tener un índice de cuánto vale la hora del trabajo de uno.

¿Cómo se trabaja el Hospital Escuela y a qué se dedica?

La atención que brinda el Hospital Escuela va desde la clínica hasta las especialidades. También esta la planta de animales exóticos. La verdad se trabaja muy bien, hay muy buenos profesionales. Lo único que no se hace son vacunaciones y castraciones, al menos que tengan un fin medicinal por ejemplo una piometra o cáncer de próstata. Tanto los médicos como los ayudantes que trabajan ahí lo hacen ad honorem. Yo por ejemplo estoy en extracciones. El hospital hoy en día se encuentra en buenas condiciones, si bien podría estar mejor (a veces faltan insumos), ya que se mantiene con lo que entra para la Facultad y un bono a los pacientes que no es ni un cuarto de lo que te puede salir afuera. El primer turno se maneja como un hospital de humanos, hay que ir a la mañana a hacer la cola, hay un cupo limitado y después los turnos se van dando a medida que te atienden los especialistas.
A mi me gusta trabajar ahí, el ambiente es lindo y la verdad siento que estoy con los mejores médicos. Si no entendes algo te lo explican, si no te sentís preparado no te obligan a hacer nada, la mayoría también son profesores así que saben cómo manejarse con los alumnos.

En lo personal ¿Qué te gusta de tu profesión? ¿Qué te parece importante de la carrera?

Más de la carrera que de la profesion lo que me gusta es que tenés muchas ramas para seguir. Cuando me anoté pensé que era sólo medicina veterinaria y después me di cuenta que también tiene la rama de salud pública donde se trabaja mucho con el hombre. Tenés producción, tenés clínica de diferentes animales, cardiología, neurología. Además lo que me gusta es que te enseñan todo y podés saber un poco de todo, y depende de vos la especialización que te interese. Lo bueno es que no dejás de ser médico clínico aunque te dediques a otra cosa. Por ejemplo sos cardiólogo y nunca dejas de ser clínico y eso no pasa en humanos. También lo que me gusta es que se trabaja mucho con las personas, aunque no lo sepan, y antes que un médico veterinario sos un agente de salud pública y creo que eso es lo que más me gusta, que incluye a todas las especies. Me parece que algo importante de la carrera es que se unan la especie humana con el resto de las especies animales y haya una misma importancia: la salud de uno es la salud del otro también.

¿Qué te gustaría aportar como profesional?

Como profesional me gustaría aportar en concientizar a la sociedad sobre el rol del veterinario y lo importante que es la medicina veterinaria, en mantener la salud de los animales. Ya que si mantenemos la salud de los animales también se evitan muchos problemas a los humanos, como el control de la zoonosis. Cuesta mucho que la gente haga ciertas cosas con sus mascotas y no entienden que se hace para que nosotros no nos enfermemos.

 
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