Decenas de jóvenes se manifestaron el día de ayer en las calles de la Ciudad de México demandando más lugares para que nadie más se quede fuera sin posibilidades de continuar sus estudios, además de aumento al presupuesto a la educación pública.
En este último proceso de selección fueron rechazados más de 250 mil jóvenes de la educación superior.
Leer: Rechazados de la UNAM el 91% de los aspirantes
Posteriormente, en reunión con funcionarios de la SEP y representantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN) se discutió el poder abrir al menos 300 lugares para algunos de los jóvenes excluidos.
Leer: La verdad detrás de los exámenes de admisión a las universidades
Con estas acciones han conseguido que el IPN abra en octubre una convocatoria especial, la UPN prometió abrir espacios (aunque sin definir los términos); mientras que la UAEM concertó que los lugares que no se cubran serán puestos a disposición de otros aspirantes.
Educación para todos
Exigir que todos tengan acceso a la educación es una arista de la lucha contra la implementación de la reforma educativa, contra una educación técnica que sólo responde a los intereses del mercado internacional y no se preocupa por el bienestar y formación integrales de nuestra juventud. Esta lucha ha sido encabezada por el magisterio combativo de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y ha despertado la solidaridad de estudiantes y padres de familia a nivel nacional.
La apertura de más espacios en las universidades tiene que venir acompañada de la demanda por una educación pública y gratuita, pero también por un nuevo tipo de educación que nos ayude a enfrentar las condiciones precarias que sufrimos la juventud hoy en día.
Leer: La enorme importancia de las Ciencias Sociales y las Humanidades
Luchamos por universidades que pongan sus conocimientos al servicio del pueblo pobre y trabajador y que recupere la visión humanista que está siendo aniquilada con la modificación arbitraria de planes y programas de estudio, recorte al presupuesto y la eliminación de grupos. Para lograr este objetivo, es indispensable la unidad de estudiantes y maestros, así como de los trabajadores que día con día le dan vida a las universidades en nuestro país.
Foto: Noticias MVS | 
