LID: ¿Cuáles fueron las principales resoluciones que tomó la X Conferencia de la Fracción Trotskista respecto a Left Voice y el público angloparlante?
Discutimos fortalecer Left Voice para convertirlo en una voz de los trabajadores y los oprimidos en Estados Unidos en un contexto de múltiples fenómenos políticos sobre los cuales queremos plantear el punto de vista de la izquierda revolucionaria. Esto lo comenzamos a hacer a partir de varios artículos denunciando la violencia policial contra los negros y reflejando en nuestras páginas la lucha del movimiento Black Lives Matter.
Queremos ampliar nuestra red de colaboradores a los jóvenes que están desencantados con los partidos tradicionales y con el reciente aval de Sanders a la candidatura de Hillary Clinton, quien representa la política guerrerista de los ¨drones¨ que matan a la población civil en el medio oriente, la deportación a los migrantes, el encarcelamiento y violencia contra los negros.
También aspiramos a contribuir a los grandes debates estratégicos, ideológicos y políticos de la izquierda angloparlante.
Queremos también expandir esa red de colaboradores al Reino Unido que tiene importantes fenómenos políticos que se expresan con el fortalecimiento de Jeremy Corbyn por un lado y con el Brexit impulsado por la derecha por otro.
Es muy importante para nosotros que las ideas de los grupos que impulsamos la Red Internacional de Diarios digitales, lleguen a los trabajadores, jóvenes y oprimidos del mundo angloparlante. Por ejemplo, nos interesa profundizar la relación y colaboración común con La Izquierda Diario México para ser una voz que plantee la unidad de los trabajadores mexicanos, negros y blancos a los dos lados de la frontera.
LID: Como mencionas, la realidad estadounidense se está complejizando ¿Qué fenómenos están detrás de la interna presidencial?
Para explicar los fenómenos actuales tenemos que volver al 2008 cuando estalló la crisis económica por un lado (aumentando radicalmente el desempleo, mucha gente perdió sus casas). Y por otro la elección de Obama como el primer presidente negro bajo el lema de esperanza y cambio, despertando grandes expectativas en la juventud y la población negra. Sin embargo, con el pasar de los años, toda esta gente que se esperanzó está desencantada porque Obama salvó a los bancos, deportó más inmigrantes que nunca en la historia de Estados Unidos y continuaron la violencia policial contra los negros y su encarcelamiento a gran escala (se estima que 1 de cada 3 hombres negros van a pasar por la prisión en algún momento de su vida). Aunque la economía no está en recesión, los empleos que se crearon son mucho más precarios que los que había antes de la crisis. Eso permitió que en el 2012 surgiera Occupy Wall Street donde por primera vez en años se habló de la desigualdad en Estados Unidos, mostrando que los grandes empresarios continuaban lucrando escandalosamente mientras la mayor parte de la población sufre la pobreza, levantando la consigna de “somos del 99%”. En el 2013 comenzó también el movimiento Black Lives Matter con la muerte de Trayvon Martin, un niño de 16 años que estaba patinando y que fue asesinado por un hombre blanco armado que posteriormente fue dejado en libertad por un tribunal. Desde el 2013, cada año hemos visto estallar grandes movimiento que levantan “Black lives matter” en respuesta a la violencia racista de la policía en varios lugares del país.
Estas son las bases para explicar porque en las primarias, frente al desprestigio de los dos grandes partidos de la clase dominante en Estados Unidos, el demócrata y el republicano, surgieran fenómenos anti establishment por izquierda como Sanders y por derecha como Trump.
Ahora que Sanders apoyó a Hillary Clinton, aún tenemos que ver a dónde va la base social (compuesta esencialmente por jóvenes) que fortaleció el fenómeno Sanders. Lo auspicioso es que se trata de una juventud que expresa nuevas formas de pensar y un cuestionamiento a los aspectos más salvajes del capitalismo.
En síntesis, la crisis económica y la lenta recuperación, el movimiento negro contra el racismo del Estado, el Occupy Wall Street y los jóvenes que vieron con simpatía la idea de socialismo en la campaña de Sanders expresan un cambio de pensar que, de profundizarse, puede pre anunciar un giro a izquierda en los próximos años.
LID: ¿Cómo está ahora la elección presidencial?
Por un lado, la burguesía entera está unida detrás de Hillary Clinton, donando mucho dinero a su campaña e inclusive sumando republicanos que dicen que la van a votar. Su campaña usa el miedo hacia Trump para tratar de atraer a los votantes de Sanders y va agresivamente detrás de una base republicana que también tiene miedo de Trump, tratando de aparecer como “candidata responsable”. En realidad Hillary Clinton no es ninguna alternativa para la juventud y los trabajadores, representa lo más concentrado de los intereses de la burguesía imperialista y las trasnacionales y las aspiraciones de Estados Unidos de recomponer su hegemonía a nivel mundial de maneras probablemente mucho más agresivas. Por otra lado, Trump se demuestra un candidato “incontrolable” por el partido republicano en su política racista que inclusive ya lo llevó a denigrar a la familia de un miembro del ejército norteamericano que murió en Iraq. Por eso Trump está cayendo en las encuestas. |