La Gerencia de Personal incrementó los salarios de los flamantes agremiados en la cifra equivalente al pago mensual de su afiliación. Pocos días después, quien estaba a cargo de esa gerencia se jubiló y paso a trabajar en el mencionado gremio. Es decir, saltó el mostrador.
Ante la casi desaparición de la Unión de Trabajadores de Prensa (UTPBA) un gremio complaciente con la administración ruinosa de María Seoane, la ex periodista devenida en funcionaria decidió asociarse al gremio en el AATRAC (Asociación Argentinas de Trabajadores de las Comunicaciones) que agrupa a los operadores de radio) pero que en Radio Nacional originalmente agrupó a los telegrafistas, aquellos que vienen del viejo Correo, en cuya jurisdicción nació la emisora en los primeros gobiernos peronistas.
El macrismo parece haber imitado a Seoane en materia de política gremial. El gremio que representa a los operadores, aliado siempre al gobierno de turno y que supo ponerle una placa de reconocimiento a Julio Maharbiz (director de la gestión Menem) quizá para reconocerle su récord en el despido de trabajadores, como los demás de la emisora nunca tuvo más de tres o cuatro delegados. Es el número permitido por la Ley de Asociaciones Profesionales que está directamente ligado a la cantidad de empleados de cada empresa. Imprevistamente, en sus últimas elecciones AATRAC acaba de pasar de tener 3 delegados a incorporar 14. Estos solo pueden tener fueros gremiales con el visto bueno de la empresa, en este caso Radio y Televisión Argentina y el Ministerio de Trabajo.
Lo sintomático es que el 90 % de esos nuevos delegados ni siquiera son operadores, sí en cambio, notorios militantes de La Cámpora sin antigüedad en el gremio. Todos ingresaron como productores o periodistas. Ante el avance creciente del nuevo gremio combativo de Prensa el SIPREBA (Sindicato de Prensa de Buenos Aires) el macrismo parece no hacerle asco a darle cobijo a ex K arrepentidos que supieron acompañar a María Seoane. No hay mejor protección contra el despido que los fueros gremiales. La impunidad es solo un detalle. |