Es sabido que esta empresa tiene preferencia en tomar aquellos trabajadores con mayores necesidades. Lo que busca esta patronal es justamente aprovecharse de aquellos más necesitados, aquellos que se ven muchas veces obligados a tener que aguantar terribles condiciones de trabajo porque sus necesidades son grandes.
En los puestos de trabajo no se cumplen las normas de seguridad y faltan elementos de protección personal. Esto genera un ambiente propenso a los accidentes. También un mayor deterioro de nuestra salud. Pero lo que llama la atención que plata para nuevas máquinas de última generación tienen, pero para salarios, seguridad e higiene evidentemente no.
Se ejerce un control represivo hacia los trabajadores. Hay cámaras por todos lados que son constantemente vigiladas para observar como trabajan los obreros. Los encargados te tratan mal constantemente. Y nadie les para la mano a la prepotencia de los jefes. El que se atreve a contestar queda en el ojo de la tormenta y lo empiezan a perseguir. Esta jefatura ya tiene más de un año y es costumbre suspender, hacer descargos y otras formas de persecución como forma de trabajo cotidiano.
La empresa le quiere hacer creer a los trabajadores que las opciones no son muchas: por un lado te presionan tanto que te cansas y te vas. Si en cambio tenés algo de antigüedad te arman una causa para echarte. Este no puede ser el futuro de los trabajadores y sus familias en Samseng.
Hay sobradas muestras que cuando los trabajadores se unieron y organizaron lograron estar mejor. Consiguiendo mejorar salarios y condiciones de trabajo.
Las páginas de La Izquierda Diario están abiertas a todos los trabajadores que quieran hacer escuchar su denuncia. Como así también dejamos a disposición un número de teléfono para todos aquellos que quieran organizarse. |