Vuelven a sonar los “tambores de guerra” en el bus urbano de Zaragoza. Tras la histórica huelga de 4 meses, el pacto que puso fin a la misma, y 4 meses de “calma tensa”, a los trabajadores se les ha acabado la paciencia.
El presidente del comité de empresa, Javier Anadón, ha hecho público un comunicado en el que avanza que a partir del 21 de septiembre se movilizarán de nuevo. Están "hartos" de que aún no se haya instalado ningún aseo en los finales de línea, una de sus reivindicaciones principales durante la pasada huelga.
La decisión tomada, aprobada por unanimidad de todo el comité, será realizar una concentración el 21 de septiembre y posteriormente manifestarse para denunciar el incumplimiento de plazos en la instalación de los aseos. Además han advertido que si continúa esta situación estudiarán otras movilizaciones en octubre.
De la situación actual de incumplimiento del acuerdo han culpado tanto a la empresa como al Servicio de Movilidad del Ayuntamiento. Según denuncian han tenido 4 meses para llevar a cabo estas mejoras y no han hecho nada. El caso, dicen, es que ya sea por falta de interés o por la burocracia municipal, no se está cumpliendo una reivindicación básica de la pasada huelga.
Además han reclamado a la empresa la readmisión inmediata de la conductora y del mecánico que fueron despedidos recientemente y la contratación de más trabajadores hasta completar la plantilla, lo que crearía más de cuarenta nuevos puestos.
Por último, han denunciado con rotundidad, que mientras todo esto ocurre, se siguen realizando miles de horas extras", a pesar de que la Inspección ha sancionado a Auzsa por incumplir el Estatuto de los Trabajadores, al superar el tope de 80 horas al año que se puede hacer por empleado. Según sus cálculos realizados, hasta ahora se han realizado este año más de 26.000 horas extras, 6.917 de ellas en junio frente a los 2.420 del año pasado, por lo que han exigido el cese de estos incumplimientos y el cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales para evitar accidentes.
Como ya hemos denunciado en otros artículos, los llamados “Ayuntamientos del Cambio”, ya sea en Madrid, Barcelona o en este caso en Zaragoza, acaban garantizando antes los intereses de las empresas privadas, que las de los trabajadores.
El comité de empresa de AUZSA, tras conocer la noticia de que la justicia anuló la adjudicación de los buses a AUZSA, pide al Ayuntamiento que cumpla con su programa electoral, que remunicipalice los autobuses. Después de esta sentencia, el gobierno de Zaragoza en Común ya no puede excusarse en el coste económico que suponía romper anticipadamente el contrato con la empresa, que caducaba en 2023. |