Semanas atrás Juan Carlos Alderete, principal referente del CCC y dirigente del PCR, concurrió a la audiencia en el Aula Paulo VI del Vaticano acompañado por Emilio Román, encargado de medios de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) para "saludar a Francisco y mostrarle adhesión a su visión del mundo". Con un orgullo que causa escalofríos a quien se diga estar a favor de la liberación de las mujeres o se diga de izquierda, en su prensa no dejan lugar a dudas: “Esta visita tiene historia, en las relaciones de la propia CCC, y de antes, con sectores de la Iglesia Católica”.
El PCR del Frente Social y Popular festeja su abrazo con el Papa Francisco, o como lo conocemos nosotras, el cardenal Bergoglio que llamó a hacer una “guerra de Dios contra el matrimonio igualitario”, y encubrió la apropiación de bebés de los genocidas durante la dictadura. Tienen este encuentro en el marco de que Belén fuese efectivamente liberada de la cárcel en Tucumán. Belén, joven condenada a 8 años de prisión producto de un fallo oscurantista de una justicia clerical y misógina. Un caso emblemático para pelear por la urgente legalización del aborto, para que más de 300 mujeres no mueran al año, para que no haya más presas por abortar. Un derecho que los gobiernos negaron de manera sistemática, pero al cual la principal institución que se opone es la Iglesia.
No es de extrañar que los gobiernos que le hicieron un Código Civil a su medida y sistemáticamente nos negaron el derecho al aborto, se arrodillen en las alfombras del Vaticano. Pero lejos de naturalizar este clima reaccionario que se intenta imponer desde el Estado, cabe preguntarse entonces por este partido que mantiene relaciones carnales con Bergoglio y que desde hace años tiene un fuerte peso en la Comisión Organizadora (CO) del Encuentro Nacional de Mujeres (ENM). Que se abracen con el Papa sin escrúpulos explica por qué en un primer momento se opusieron a pronunciarse a favor del aborto legal o que puedan participar del Encuentro las compañeras trans, mostrando concepciones reaccionarias subsidiarias a la ideología papal. Y sin irnos más lejos, la negativa rotunda del PCR a que la Comisión Organizadora se pronuncie públicamente por la libertad para Belén. En todos estos casos el PCR opuso todo tipo de argumentos, al igual que a la propuesta de poder tomar resoluciones en los Encuentros para avanzar en una agenda común entre las miles de participantes que se movilizan por NiUnaMenos, por el aborto legal, por la anulación de la condena de Belén.
Como dice el dicho popular, una imagen vale más que mil palabras. En la Tapa del Hoy está Francisco y NO la Jornada Nacional por la liberación a Belén. Tanta condescendencia a las instituciones enemigas de los derechos de las mujeres ubica a esta organización en las antípodas de las que queremos plantarnos en las calles y luchar por lo que nos corresponde, enfrentando a todos los poderes de turno que nos niegan el derecho a vivir y decidir libremente.
Desde la organización de mujeres Pan y Rosas, parte de la Comisión Organizadora del próximo Encuentro en Rosario, se expresó el repudio esta reivindicación del Vaticano como institución oscurantista y opresora, verdaderamente vergonzosa para todas las luchadoras. Empezando por la quema de brujas, la pedofilia, el rol en la dictadura y la ideología que promueven permanentemente para reproducir la opresión de género bajo el capitalismo, la Iglesia es uno de los enemigos centrales de la liberación de la mujer o de las y los disidentes sexuales. Quienes integramos la Comisión Organizadora debemos alertarnos y diferenciarnos fervientemente de tal guiño al Papa a unos meses de un renovado y masivo #Niunamenos y a tan sólo 45 días de que se realice el Encuentro en Rosario.
Para fortalecer la lucha por los derechos de las mujeres y las personas LGTTBI, Pan y Rosas luchará junto a todas las organizaciones y compañeras que quieran enfrentar a la Iglesia como institución patriarcal y su injerencia en el Estado, sabiendo que es una condición excluyente para luchar por el derecho al aborto, la anulación de la condena a Belén, y conquistar el conjunto de nuestros derechos democráticos más elementales. No hay #Niunamenos con el Vaticano. |