Luego del apagón estadístico de comienzos de la gestión de Macri, el INDEC difundió los índices de ocupación y desocupación nacionales, desagregando los números por región geográfica. Así el Gran Rosario exhibió el porcentaje de desocupación más alto a nivel nacional. Desde el gobierno santafesino responsabilizan a la gestión nacional por el rumbo económico.
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A nivel nacional la tasa la desocupación alcanzó un promedio del 9,3%, según el INDEC.
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Luego de darse a conocer las cifras el Ministro de Trabajo santafesino Julio Genesini reconoció ante los medios los altos índices de desocupación provinciales y aseguró que "un sector el que más venimos detectando se ve afectado por esta disminución de trabajo es la construcción, y es un sector de alta volatilidad, es decir, si un poco reacciona la economía, reacciona la construcción, rápidamente reincorpora gente". Y agregó: "Distinto es cuando tenemos ya una situación donde se ha desmantelado una industria, una empresa". En relación a la perspectiva del empleo en la provincia, aseguró que "en definitiva lo que va a permitir consolidar los puestos de trabajo e incrementarlos es un funcionamiento de la economía que tenga un respaldo más fuerte en el mercado interno, que permita mejores condiciones para evolucionar y para invertir".
Desde la izquierda pusieron el acento en la responsabilidad que ambos estamentos gubernamentales tienen en relación a esta situación social. El dirigente del PTS en el Frente de Izquierda de Santa Fe declaró que "existe un cinismo muy grande tanto del gobierno nacional de Cambiemos, como del gobierno provincial. Desde que asumió Macri despidió trabajadores, aplicó tarifazos y benefició con exenciones impositivas a los empresarios. Por su parte el partido socialista provincial se cansó de justificar a los empresarios que despiden y atacan, excusándose en el aumento de las tarifas y de los costos, y en la competencia desleal por la apertura de las importaciones".
En relación a los sectores más afectados planteó: "Es falso, como dice Genesini, que la pérdida de puestos de trabajo no se diera en las industrias. En Santa Fe las metalúrgicas de la línea blanca vienen suspendiendo y despidiendo trabajadores sin que el gobierno provincial mueva un dedo. En Fray Luis Beltrán la fábrica ArZinc fue cerrada con el pretexto de una crisis que los empresarios no pudieron comprobar, pero esto no alcanzó para que Lifschitz tomara medidas que evitaran que los trabajadores quedaran en la calle". Finalizó planteando que "ante la pasividad de los sindicatos, que están llevando adelante una tregua con el gobierno y los empresarios, se hace más necesaria la organización y movilización de los trabajadores para enfrentar el ajuste". | 
