El pasado 21 de Agosto estudiantes y profesores de la carrera del sistema abierto de sociología de la Universidad Veracruzana (UV), definieron en asamblea la toma de instalaciones de la Facultad en Orizaba, donde se imparten los cursos. El motivo fue la desaparición de uno de los grupos del sistema abierto, así como la falta de horarios para cursar diversas materias en dicha carrera.
La desaparición del grupo significa el recorte de la matrícula y la reducción de la plantilla docente, por lo que estudiantes y profesores identifican este golpe como el avance de una política para desaparecer la carrera en su modalidad abierta.
La excusa de las autoridades universitarias fue que existen “pocos” aspirantes para ingresar a la carrera, por lo que tiene sentido reducir los grupos al no haber tanta demanda, aspecto que, según estudiantes y profesores, se deriva de la falta de promoción de la carrera por parte de la rectoría y autoridades de la UV.
En un pliego petitorio derivado de la asamblea de estudiantes y profesores, se exige a la rectoría de la UV la reapertura del grupo de nuevo ingreso, llenando el cupo con los estudiantes que no fueron admitidos, así como una promoción sistemática de la carrera de sociología a nivel regional para mantener cubierto el cupo de la matrícula.
También exigieron resolución de diversas problemáticas administrativas que los alumnos enfrentan al cursar la modalidad abierta, responsabilizando al director general Miguel Sosa.
Un problema más para la rectoría de la UV que no ha logrado disciplinar al estudiantado que a inicios del 2016 se movilizó masivamente en cinco regiones donde hay planteles de la UV, para exigir más presupuesto y el pago de la deuda del Gobierno de Veracruz con la Universidad.
Sociología, la carrera incómoda que preocupa a más de un rectorado
El ataque a la carrera de sociología en la UV no es aislado, como demuestra el arbitrario recorte de matrícula en la Facultad de Estudios Superiores Acatlán (no sólo en Sociología sino en varias carreras de Ciencias Sociales y humanidades) en el Estado de México y en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en la capital del país.
Los recortes son un claro ejemplo de la avanzada contra la educación pública que el gobierno de Peña Nieto impone con represión a nivel nacional, sumando el plan de desaparecer las carreras “incómodas”, más críticas y organizadas a un recorte de 4 mil millones a la educación pública.
Así como las reformas las enfrenta el magisterio en las calles, la movilización ha demostrado ser una gran herramienta para frenar los recortes. Estudiantes y profesores marcharon en Ciudad Universitaria de la UNAM para denunciar esta ofensiva, convocando a estudiantes, académicos y trabajadores a defender la educación pública y gratuita.
Universitarios, jóvenes excluidos de la educación y maestros debemos entender el ataque de conjunto y pelear por enfrentar la Reforma Educativa y sus distintas expresiones con la movilización obrera y popular en todo el país. |