Lo hizo mediante un dictamen que presentó luego de que la Cancillería en nombre del Gobierno de Macri reconociera al gobierno de Temer tras la consumación del golpe institucional. También apoyó a la oposición de derecha en Venezuela. La izquierda denunció tajantemente el golpe en Brasil.
Luego del circo del proceso del impeachment que impulsó en Brasil la derecha imperialista junto con el “partido judicial” y los grandes medios hegemónicos para consumar el golpe institucional que destituyó a la ex presidenta Dilma Rousseff, el circo se trasladó al Congreso Nacional de nuestro país, con la diputada Elisa Carrió como vocera.
El oficialismo impulsó dos dictámenes de declaración en la sesión del día de ayer, uno sobre Brasil y otro sobre Venezuela. La diputada Carrió, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto, fue la encargada de plantear los argumentos de dichos dictámenes. En relación a los hechos en Brasil, y en lo que puede considerarse una especie de burla, no se denuncia ningún golpe institucional y ni siquiera se nombra a la destituida presidenta. Constituye un acto cínico por parte de los diputados de Cambiemos ya que la Cancillería en nombre del Gobierno comunicó que "respeta el proceso institucional verificado" en Brasil que llevó a la destitución de Rousseff.
En el texto que votó el oficialismo con el apoyo de diputados del Frente Renovador y el GEN, entre otros, se buscó reafirmar los “principios” en abstracto del “derecho a la democracia”, así como “el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales”.
El kirchnerismo se opuso al dictamen de mayoría y propuso agregar al texto de Cambiemos dos párrafos, que si bien incorporaban la denuncia al “golpe de Estado parlamentario contra la presidenta”, embellecen como marcó la diputada del Frente de Izquierda Myriam Bregman “a organismos regionales que ya tienen en su haber otro golpe institucional como el que se le realizó al presidente Lugo en Paraguay, sin que lo hayan enfrentado seriamente”.
Con el mismo cinismo, el dictamen de declaración impulsado por Cambiemos respecto a la situación en Venezuela fue casi una copia del de Brasil. Recordemos que en el día de ayer la oposición de derecha convocó a manifestarse contra el Gobierno de Maduro bajo la más que sugestiva consigna de “toma de Caracas”, en exigencia de la confirmación para enero del “referéndum revocatorio”. El chavismo por su parte respondió con su propia movilización.
La diputada Carrió, en sintonía con esos planteos de la oposición derechista en Venezuela dijo: “Los principios que enumeramos son los de la Carta Democrática Interamericana” de la Organización de los Estados Americanos (OEA) impulsada por el imperialismo yanqui.
A su turno, la diputada Margarita Stolbizer del frente denominado Progresistas -hoy encaminado hacia una alianza con Sergio Massa-, planteó en la misma sintonía que apuesta “al diálogo”, y que para que ese diálogo entre la derecha y el chavismo se dé “tienen que darse dos condiciones”: la liberación de Leopoldo López y la definición de la fecha del referéndum revocatorio para antes del 9 de enero como exige el MUD.
Por su parte la diputada Myriam Bregman del Frente de Izquierda fue tajante en su intervención: “Acaba de consumarse el golpe institucional”. Y agregó: “hace cuatro meses hicimos una moción en esta Cámara para que se repudiara el golpe institucional que ya estaba en curso. El oficialismo se negó”.
Además, Bregman denunció que “61 senadores decidieron expropiar la voluntad de millones que habían votado a la presidenta Rousseff”. Y agregó que “se trata lisa y llanamente un aval al secuestro de la voluntad popular de millones que votaron por Dilma Rousseff. Lo decimos con la autoridad de pertenecer a una corriente, el MRT - Movimento Revolucionário de Trabalhadores de Brasil, que enfrentó en las calles el ajuste que Dilma había prometido no realizar”.
Dilma fue depuesta porque la clase empresarial brasilera con el imperialismo detrás tiene como interés pasar un ajuste mucho más brutal contra el pueblo trabajador de Brasil
“Nos solidarizamos, y alentamos todas las luchas y movilizaciones contra el Gobierno de Temer. Los principales afectados de esta nueva avanzada de la derecha son los trabajadores, los campesinos sin tierra y todos los sectores explotados y oprimidos del país hermano. Sin medias tintas: ¡hay que condenar el golpe institucional de Temer en Brasil y desconocer su Gobierno de facto! Abajo el golpe, fuera Temer, viva la lucha de los trabajadores de Brasil”, concluyó su intervención la diputada del FIT.
A su turno el diputado Néstor Pitrola del PO/FIT aseguró: “estamos frente a un golpe institucional. El golpe es una ofensiva contra las masas popular, la desocupación llegó al 12 por ciento. La crisis a la que se ha llegado es en parte por la facción que antes le servía de apoyo a Dilma. El PO fue fundador del PT, pero rompió cuando el PT arreglo con el FMI”.
También, la diputada Alcira Argumedo de Proyecto Sur denunció en su intervención que el golpe es parte de un plan para implementar en la región el Tratado de Transpacífico.
Una nueva burla de Cambiemos y sus aliados, que una vez más se negaron en el recinto a llamar a las cosas por su nombre y a condenar el golpe en Brasil. El golpista Temer consiguió en el día de hoy un nuevo pronunciamiento a su favor de los de siempre.
