El juez federal Ariel Lijo libró una orden para requisar la fundación que preside la vicepresidenta Gabriela Michetti en busca de sus libros contables. Sin embargo, pese a la orden judicial el pedido no pudo llevarse a cabo ya que cuando los agentes del juzgado llegaron a la sede de SUMA los libros requeridos por el magistrado no estaban. Supuestamente, estarían en poder del contador de la fundación y se comprometieron a realizar la presentación mañana jueves ante los tribunales federales.
Las diligencias se realizaron en el marco de la causa que investiga el origen del dinero que le robaron a la funcionaria de su casa el día que ganó el ballotage acompañando en la fórmula presidencial a Mauricio Macri. Según la denuncia, faltaron 200 mil pesos que pertenecían a donaciones que se realizaron a la Fundación SUMA y unos 45 mil que, según Michetti, eran para una refacción y el manejo de la casa, mientras había otros 50 mil dólares que salieron de un préstamo de su novio, Juan Tonelli. Por este motivo, el juez pedirá también las declaraciones juradas de la pareja de Michetti.
Por otra parte, Lijo recibió las declaraciones juradas que envió la AFIP, de lo que surge que la Fundación recibió $4.100.000 en donaciones, a pesar que la página de internet de SUMA aclara que es una organización sin fines de lucro.
Te puede interesar: Gabriela Michetti imputada por el origen del dinero robado de su casa |