El informe fue presentado este martes por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, que evalúa la situación de la guerra civil en ese país. El documento afirma que el número de muertes que relevado en Siria desde el inicio del conflicto en 2011 había superado las 301.000.
El Observatorio, con sede en Reino Unido, dijo que había “registrado la muerte de 301.781 civiles y combatientes desde el 18 de marzo de 2011”, pero estimaba que el número total de muertos se sitúa en alrededor de 430.000.
El informe se conoció mientras se cumple el segundo día de tregua, de un total de siete, acordado por Estados Unidos y Rusia el sábado pasado y aceptado por las organizaciones opositoras y, a último momento, por el gobierno de Assad.
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Algunos ataques y bombardeos aéreos fueron reportados en las primera horas de la tregua el lunes por la tarde, pero según el Observatorio la violencia parecía disiparse y durante el primer día no se habría registrado la muerte de un solo civil a causa de los enfrentamientos.
El observatorio dijo que al menos 31 personas murieron por ofensivas aéreas en la provincia de Idlib y el este de Damasco, y por bombardeos en aldeas de Homs y ataques con misiles en la ciudad de Alepo el lunes, antes del inicio de la tregua.
El régimen de Al Assad mantuvo una ofensiva hasta último momento, cuando confirmó que se plegaba al cese el fuego. El acuerdo alcanzado por Estados Unidos y Rusia llega tras varios intentos fracasados, y todo indica que éste se realiza bajo una extrema fragilidad. Los cancilleres Kerry y Lavrov habían acordado el alto el fuego el sábado, pero sin ningún plan predeterminado a futuro sobre algún tipo de acuerdo en cuanto al régimen, Assad o los grupos opositores. El acuerdo solo estipula que de alcanzarse siente días seguidos de tregua, Estados Unidos y Rusia iniciarían una ofensiva conjunta sobre el Estado Islámico. Este sería un punto de acuerdo básico pero minúsculo frente al empantanamiento diplomático ante una salida negociada al conflicto Sirio, profundizada por la ofensiva militar en la que intervienen potencias imperialistas y regionales con intereses propios. El teatro de operaciones sirio en el que se enfrentan no solo los intereses de Estados Unidos y Rusia, sino los conflictos regionales entre Arabia Saudita e Irán por un lado, y el conflicto de Turquía con los kurdos por el otro, le imprimen un sello de alta volatilidad a esta tregua y a las hipotéticas negociaciones sobre el futuro del país.
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Fuente: Agencias | 
