Según se informó hoy, el club San Cirano definió suspender a los tres jugadores de rugby que atacaron a una persona en situación de calle y lo filmaron.
Los hechos se conocieron porque el video de la agresión empezó a circular por redes sociales. Su difusión en Facebook se produjo un enorme rechazo.
Quien llevó adelante la agresión fue Julián Cirigliano. Otros dos jugadores y socios, cuyos nombres no fueron dados a conocer también del ataque, por lo que serán suspendidos.
La Comisión Directiva del club dio a conocer un comunicado en el que repudiaba “todo hecho de violencia, en términos generales, y particularmente este hecho”.
Los rugbiers fueron suspendidos y se evalúa si, en el caso de Cirigliano, la sanción no será de por vida. Mientras tanto, el jugador aceptó “realizar tareas comunitarias” como una forma de “reparar” lo hecho.
