Un trabajador menos judicializado por luchar. Tal y como había asegurado Baigorria, la causa estuvo armada para callar a las y los que denuncian y reclaman. El policía Matías Sánchez lo acusaba por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, cuando lo que sucedió fue que se negó a cumplir con un capricho de la fuerza, aunque sí ofreció el servicio que realizaba habitualmente –traslado de personas heridas al hospital-.
Esta mañana, la jueza Ana Malvido hizo lugar al pedido de sobreseimiento que realizó la defensa. Tras ver la grabación de la audiencia de control de acusación a la que permanentemente hicieron referencia las doctoras Dal Bianco y Hormazabal para destacar la violación del derecho a una defensa eficaz, la magistrada coincidió en que no había estado garantizada esa cuestión esencial. También estuvo de acuerdo en que la acusación contra Baigorria no fue clara y que la imputación carece de relación con el hecho.
Fuente: El Zumbido |