El avance que se ha logrado en materia de informática y telecomunicaciones las últimas décadas nos han permito aventajarnos como sociedad de un flujo de información rápido y potente. Podemos navegar en segundos por la web para encontrar textos, música, fotografías, planos y muchos otros tipos de información, además de conectarnos mediante las cada vez más crecientes redes sociales.
Una de las características más potentes de la web es que nos permite descargar contenido de otros usuarios, es decir, llevar a nuestra computadora material digital que otra persona en alguna parte del mundo dejó en internet.
Existen sitios web que han sido creados específicamente con el fin de hacer disponible material para descargar, como es el caso de sitios de descargas torrent, como por ejemplo la web “The Pirate Bay”.
Torrents
Existen muchas formas de descargar archivos de la web, tal vez el más popular es el típico “Guardar como” que se utiliza para descargar imágenes. Lo que está ocurriendo al usar este método es que desde nuestra computadora estamos sacando una copia de un archivo que se encuentra en un computador en otra parte del mundo (este computador es llamado host).
Otra manera de descargar archivos de internet es hacer uso de las redes denominadas P2P (Peer-to-peer o red entre pares). Con estos sistemas no existe un solo host, sino que hay varios computadores que almacenan la información o parte de ésta en diferentes lugares del globo. Como consecuencia de esto último es que si se desea hacer que un archivo subido al internet deje de existir entonces no basta con borrarlo de una sola computadora, sino que hay que borrarlo de todas.
Cuando se dice que “descargamos un archivo por torrent” lo que se está exponiendo es que se está descargando un archivo por partes, usando el sistema de redes P2P.
De esta manera viven muchos archivos en internet que podrían transgredir leyes de derechos de autor, pero con una posibilidad muy baja de ser eliminados totalmente. Esto se traduce en poder compartir y poseer archivos e información de manera más libre, en general de manera gratuita para las y los usuarios de todo el mundo que cotidianamente hacen uso de la internet para conseguir miles de millones de archivos.
Claramente esto ataca los intereses de grandes empresas que se valen de la propiedad intelectual y de derechos de autor para ganar dinero a costa de restringir el acceso al material que venden o incluso arriendan.
Persecusión a The Pirate Bay
Como se comentó anteriormente, The Pirate Bay es un sitio web que tiene el propósito de entregar acceso a miles de archivos torrent y es uno de los más utilizados.
The Pirate Bay nació en 2003 en Suecia por la organización contra los derechos de autor llamada Piratbyrån. Desde ese entonces tanto la web como quienes la fundaron y administraron han sufrido redadas y persecución bajo el alero de que “prestaban ayuda a otros para violar los derechos de autor”, enfrentando penas de cárcel y multas millonarias. Además de ésto el sitio a tenido que cambiar sus servidores y dominios en reiteradas ocasiones a otros países como a Perú o Guyana.
En mayo de 2015, luego de que tuviesen que cambiar otra vez de dominio, The Pirate Bay usa un nuevo logo en el que anuncian quee tendrían ya no sólo un dominio sino que 6.
La marca de sitio web malicioso en navegadores como Chrome y Firefox
Al hacer una búsqueda en Google Chrome o en Mozilla Firefox dentro del sitio The Pirate Bay saltará el mensaje de que estamos navegando en un sitio malicioso. Esto ocurre porque The Pirate Bay se encuentra dentro de los sitios que el filtro antimalware de Google reconoce como maliciosos.
La verdad es que es probable que dentro de algún archivo subido se alojen virus informáticos, así como ocurre en muchos otros sitios webs de descargas o incluso en los que no descargamos nada y que no están bloqueados. El punto es que este aviso nace por la presión de las empresas que mandan miles de denuncias por vulneración de derechos de autor al año para cerrar y bloquear sitios de descargas. Por ejemplo, Warner Bros., es una de las empresas que en esta cruzada contra la piratería envía miles de denuncias a Google para bloquear otros sitios. Ha sido tanto así que incluso han llegado a reportar su propio sitio como ilegal y solo en este año Google ha bloqueado más de 4 millones de enlaces como presuntos infractores de los derechos de autor pero pasando a bloquear incluso sitios que no vulneran estos derechos.
El sitio puede seguir siendo visitado, y el filtro antimalware de Google puede ser desactivado desde las opciones de bloqueo de contenido peligroso de Firefox y Chrome.
Por ahora, el sistema P2P sigue siendo uno de los métodos que podremos seguir utilizando para mantener en la internet archivos e información que suponen peligros económicos para las grandes empresas por albergar piratería en un mundo en el que la transmisión de información se hace cada vez más rápida y extendida. Por el momento, estas grandes empresas seguirán persiguiendo a quienes les supongan pérdidas de ingresos económicos por disponer de material que ya se ha hecho público y gratuito para quienes no pueden darse el lujo de pagar por el disco de su artista favorito/a o simplemente no quieren pagar por ello o de todo libro compartido en la internet y que difícilmente se puede hallar a un precio accesible en las librerías del mundo. |